Así lo asegura en entrevista con Yamid Amat, María del Rosario Guerra.
El tercer canal privado de televisión entró en su recta final y será adjudicado en enero del año entrante, si se cumple el cronograma aprobado por la Comisión Nacional de Televisión (CNTV). En la siguiente entrevista, la ministra de Comunicaciones, María del Rosario Guerra, lo considera fundamental y da por un hecho su adjudicación. Hace duras críticas a algunas telenovelas que están al aire, pues las considera exhibicionistas "de una cultura mafiosa que no tenemos los colombianos".
Confirma el lanzamiento de nuestro primer satélite, para comunicaciones y educación. La Ministra, quien ejerce el cargo desde junio del 2006, anuncia su retiro del gabinete al comenzar el año.
¿Está de acuerdo con la fecha del 29 de enero, fijada por la CNTV, para la adjudicación del tercer canal?
Me parece razonable. Este tema lleva más de dos años.Los prepliegos están publicados desde abril, se hicieron comentarios cuyas respuestas motivaron a la CNTV a postergar la apertura de la licitación. Luego, se presentó la diferencia jurídica con la Procuraduría. Con esto se muestra que no ha habido ni apresuramiento ni improvisación. Estoy convencida de que está dado todo para culminar satisfactoriamente el proceso.
¿Usted cree que el país necesita un tercer canal?
Claro que sí, y los televidentes lo esperan. Los colombianos quieren un nuevo canal con contenidos diferentes a los actuales. Así lo demuestran las encuestas que ha hecho la CNTV.
¿A qué adjudica los tropiezos que ha tenido el proceso del tercer canal?
Al trámite normal de procesos contractuales de esta envergadura, y a la defensa natural que los actuales operadores de televisión abierta hacen de sus legítimos intereses. En promedio, la pauta publicitaria anual de los dos canales privados se acerca a un billón de pesos. Al entrar en operación un nuevo competidor, está previsto que en un año largo ese nuevo canal capture al menos el 30 por ciento de esa pauta. Desde el Estado, estamos convencidos de que es socialmente preferible una competencia sana y de calidad, que genere contenidos que efectivamente respondan a lo que el televidente colombiano está esperando.
¿Qué opinión tiene del contenido de hoy de la TV privada?
No me gusta lo que he estado viendo en los últimos meses en el horario prime, de 8 a 11 de la noche. Nos están mostrando una cultura mafiosa, cuando todo el país ha venido luchando por limpiar el nombre de Colombia. No es cierto que a los colombianos nos guste esa identidad, ni que nuestros hombres y mujeres puedan identificarse con estos estereotipos. Por supuesto que las telenovelas deben ser parte de la programación, pero no con los excesos de lo que estamos viendo. La televisión, por definición, tiene fines educativos, culturales y de entretenimiento. No de exaltación de la violencia, el delito y la vulgaridad.
Pero, en los casos a los que usted se refiere, ¿esas telenovelas no son un reflejo, triste, pero verdadero de lo que vive el país?
No. Es un reflejo de las actuaciones de algunos, que no corresponden a la mayoría de los colombianos.
Según el concepto del Consejo de Estado, tanto la Casa Editorial EL TIEMPO, con el grupo Planeta de España, como el 'Noticiero CM&', con Prisa, también de España, y los periódicos 'El Colombiano', 'El País', 'Vanguardia Liberal' y 'El Universal', que aspiran al tercer canal pero que hoy son concesionarios de televisión, pueden licitar. ¿Qué va a pasar con Citytv o con los horarios de CM&?
Quien resulte adjudicatario del tercer canal y ostente un título de concesión para la operación del servicio de televisión en el nivel local, o sea concesionario de espacios, deberá renunciar a dichos títulos y no tendrá derecho a reclamar la devolución de ningún tipo de contraprestación. Quiero decir: la suma que pagó EL TIEMPO por la renovación de la licencia de Citytv por 10 años, no será devuelta en el caso de ganar la licitación. Tampoco se devolvería ningún pago que CM& haya hecho por la explotación de sus espacios, si fueran ellos los adjudicatarios.
Si Planeta y EL TIEMPO reciben la adjudicación, ¿qué va a pasar con Citytv?
Cualquier adjudicatario que se encuentre en situación de concurrencia de concesiones, debe renunciar al título otorgado antes de suscribir el contrato de concesión del tercer canal, y la CNTV debe licitar nuevamente la frecuencia devuelta.
¿Pero EL TIEMPO podría vender la licencia del canal o cederla?
No. Los títulos de concesión para la operación de televisión no son objeto ni de venta ni de cesión, pues sólo el Estado puede otorgarlas.
¿Si se devuelve la licencia, habrá licitación para adjudicar Citytv?
Ese es el mecanismo al que deberá acudir la CNTV para volver a adjudicar una licencia de operación de un canal local con ánimo de lucro, si así lo considera.
¿Y los espacios de CM&, si gana la licitación?
Esos espacios, renunciados por el eventual nuevo adjudicatario, deberán ser reasignados por un proceso público y objetivo de selección.
¿Pero la franja de las 9:30 de la noche en el Canal Uno seguirá siendo para un noticiero?
La CNTV decidirá en su sabiduría.
¿Y, finalmente, el tercer canal será adjudicado por subasta o por contenido?
Con el aval del Consejo de Estado, la calificación será de 50 por ciento por subasta y 50 por ciento por contenido.
¿Y eso cómo se mide?
La evaluación se estructuró sobre la posibilidad de obtener hasta mil puntos a partir de dos dimensiones, que se articulan de la siguiente manera: la apertura del sobre del plan básico de programación revelará cuál de los oferentes obtiene el mayor número de puntos, de 500 posibles en esa primera dimensión del proceso. Es decir, cuál ofrece el mayor número de horas de programación de los géneros que los televidentes demandan de la nueva oferta televisiva. Posteriormente se dará apertura al sobre de oferta económica.En ese momento se sabrá cuál es el mejor lance económico ofrecido para la concesión del tercer canal, y el proponente que lo ofrezca recibirá el mayor puntaje en esta segunda dimensión de la evaluación, es decir, 500 puntos. De esta forma, tanto la oferta de mejora de la parrilla básica de contenidos, como la oferta económica tienen igual peso relativo en la fórmula de calificación de los proponentes.
¿Cuál será la base de la subasta?
69 mil 200 millones de pesos. Unos 34,5 millones de dólares.
Para la fecha de la adjudicación, 29 de enero, aún no se sabrá si el presidente Uribe va o no va para un tercer período...
Así es.
¿Y eso es bueno o malo?
Absolutamente nada tiene que ver la adjudicación del tercer canal con la eventualidad de la reelección presidencial. Desde el 96, cuando se hicieron los estudios para permitir explotación de canales de TV abierta por operadores privados, que ganaron Caracol y RCN, se preveía la opción de dos canales más.
¿El tercer canal emitirá por UHF o por VHF?
Por ahora, se mantiene por el canal 31, es decir UHF. Pero con la CNTV hemos logrado un preacuerdo para liberar las frecuencias del canal 14 al 20 para televisión digital terrestre. Adicionalmente, para el tercer canal queda la posibilidad de solicitar a la CNTV que se le permita emitir por la actual frecuencia 13, a cambio del canal 31 inicialmente asignado. Una figura similar permitió que Caracol TV y Teveandina intercambiaran sus frecuencias de emisión (canal 5 y canal 13), previo el aval de la CNTV.
¿El tercer canal tendrá la obligación de ser digital?
Al comienzo mantendrá el actual sistema analógico. Al término del período de transición preestablecido, es decir en el 2018, tendrá que emitir su señal con tecnología digital. Es precisamente esta circunstancia la que hace que el valor de la concesión del tercer canal sea diferente al asociado con las pasadas prórrogas de los operadores actuales.Esta diferencia radica en que el nuevo operador tendrá que realizar inversiones en las dos tecnologías de emisión y transmisión: analógica y digital, mientras que a los operadores actuales y en el nuevo período de concesión sólo se reconocerán inversiones en tecnología digital. Por el otro lado, la CNTV se ha comprometido con el Ministerio a liberar la banda de 700 MHz, lo cual representará un gran avance para los servicios de telecomunicaciones.
¿Qué porcentaje de gente ve hoy TV por cable y qué porcentaje, por antena?
Más o menos, 50 por ciento y 50 por ciento. Pero ya vamos para el 55 por ciento de televisión cerrada, según la última gran encuesta integrada de hogares (enero-marzo 2009). Y hay una cosa curiosa: quienes tienen televisión por suscripción, es decir cerrada, con opción de acceder a gran cantidad de canales, en la mayoría de los casos terminan viendo Caracol y RCN.
A propósito, ¿usted es partidaria de que se autorice la transmisión de publicidad por los canales de televisión por suscripción?
La fuente fundamental de financiamiento de la televisión por suscripción es lo que paga el suscriptor por recibir el servicio. Y así debería continuar. Lo que se viene planteando en diferentes escenarios es una liberalización completa de la pauta; de tal forma que cualquier operador pueda comercializar sin restricciones de minutos por franja, ni restricciones relacionadas con el origen de la señal. Pensamos que eso no debe ser así.
¿En qué estado se halla el proyecto de ley que presentó para reformar la CNTV?
Avanzando, pues la propuesta del Ministerio ha sido acogida por los senadores de la Comisión Sexta, que prevén incluirla en el tercer debate de un proyecto sobre el sistema de televisión pública.
¿Qué busca?
Primero, proponemos que los cinco comisionados no sean de tiempo completo, ni de dedicación exclusiva. Segundo, que su función sea la de fijar las políticas de los contenidos de televisión, y no la intervención en la parte regulatoria de las redes. Tercero, propendemos por un manejo administrativo, financiero y gerencial independiente que permita eliminar cualquier asomo de "parcelas burocráticas". Cuarto, queremos que la CNTV sea mucho más pequeña de lo que es hoy, en términos de planta de personal. Si la Comisión de Regulación de Comunicaciones es de 40 personas, ¿por qué no puede ser así la CNTV? Quinto, hay que corregir la manera como se eligen dos de los cinco comisionados, en lo que se han presentado todas las irregularidades. Finalmente, lo más importante es que este organismo sea mucho más técnico que político.
¿Cómo va el propósito de lanzar nuestro primer satélite?
El proceso licitatorio se cierra el 6 de noviembre. Aspiro a que al menos tres empresas se presenten. Compañías de Rusia y de Canadá han asegurado que se van a presentar. También hay interés de una empresa de Estados Unidos.
¿La licitación es sólo para construir el satélite?
Estamos licitando la construcción, el lanzamiento, la colocación en órbita y la verificación de desempeño del primer año de operación de un satélite que nos garantice, por los próximos 15 años, brindar conectividad de Internet en banda ancha a más de 30 mil instituciones públicas, sedes educativas oficiales en su gran mayoría, del programa Compartel.
¿Comunicaciones sólo para educación?
Se verán beneficiadas por la conectividad satelital sedes educativas, pero también hospitales, concejos, juzgados y bibliotecas.
¿La banda geoestacionaria que poseemos no tiene ya polución de satélites?
En el arco 70 - 75, sí, pero Colombia tiene disponible una posición orbital en 70,9º oeste, en la banda planificada, donde se podría alojar el satélite. Lo que sucede es que la capacidad de esa banda planificada es sólo de 500 MHz, y los requerimientos técnicos del proyecto implican una capacidad de más de 650 MHz. Se va a requerir capacidad adicional, que deberá garantizar el proponente en el caso de querer utilizar nuestra posición en banda planificada. Colombia ha debido solicitar y proteger, desde el gobierno Betancur, el uso del arco 70-75, cuando se vislumbraba la necesidad de contar con un satélite.
¿Aspira a lanzar satélite, digitalizar la TV y abrir tercer canal antes de dejar el cargo?
Ese es mi sueño. Hemos venido trabajando para eso porque creo que el país lo necesita. Contratar el satélite colombiano de comunicaciones no da espera; el nuevo canal de televisión es fundamental y con relación a la digitalización, la transición se acorta cada día.
¿Es verdad que usted se retira a comienzos de año?
Sí. El primero de febrero. Para no inhabilitar a mi hermano Antonio, que aspirará al Senado.
Para la campaña de reelección del presidente Uribe, usted fue coordinadora de los temas económicos y sociales, y la propuesta de Agro ingreso Seguro fue hecha por usted y los demás miembros de la respectiva comisión programática. ¿Hasta dónde su erróneo manejo fue producto de sus colegas de gabinete?
Fue un gran salto lograr que el Congreso la aprobara, ya que está concebida para promover la competitividad rural, así como para garantizar la seguridad alimentaria. Esa política hay que corregirla, pero no matarla, porque es buena.