EE.UU. no tenía confianza con Maza Márquez: Gaviria sobre caso Galán

El expresidente revela detalles inéditos sobre la muerte del candidato presidencial.

Foto: El Tiempo
Domingo 21 de Febrero del 2016

La palabra es 'macabra'. Ninguna otra define mejor lo que el expresidente César Gaviria ha descubierto, al reunir y revisar publicaciones hechas a lo largo de 25 años sobre el asesinato de Luis Carlos Galán. Ese tema concreto hace parte de un capítulo de las memorias sobre su vida, que el exmandatario escribe hace cuatro años y que usted puede descargar aquí.

¿Por qué escribe sus memorias?

La verdad es elusiva: uno a veces piensa o cree cosas, y no necesariamente son la verdad; si somos estrictos, líderes que jugaron papel importante en la vida nacional no dejaron memorias que uno pueda decir que sean sustantivas. Son testimonios anecdóticos. Las de Lleras no alcanzan ni a cubrir la violencia liberal-conservadora. (Además: Fiscalía indaga al cuñado de Maza Márquez dentro del caso Galán)

En su opinión, ¿eso por qué ocurre?

Porque en el mundo latino se cree que no se pueden contar las conversaciones entre las personas que toman decisiones relevantes. Todas se consideran privadas. Una conversación que tiene un presidente con su ministro se considera privada. Las cosas que se conversan entre altos funcionarios públicos o un funcionario público y uno privado sobre temas de gobierno no deben permanecer secretas para siempre. Posiblemente, algunas cosas requieran una reserva coyuntural, pero no eterna. Y no me refiero a la vida privada de las personas sino a asuntos de Estado.

¿Eso es lo que usted va a revelar en sus memorias?

Voy a romper ese tabú de que las personas que fueron protagonistas de la historia y que contribuyeron a hechos que tienen importancia histórica, pues, no lo escriban. Lo que estoy haciendo lo considero responsabilidad y de transparencia.

En consecuencia, ¿lo suyo no es una investigación?

No, no es una investigación; son unas memorias que he estado escribiendo: llevo unos cuatro años en ese ejercicio.

En los casos que hayan causado crisis o controversias, ¿dará nombres?

Sí, por supuesto.

¿Eso no podría molestar a alguien?

Sí, pero le doy un ejemplo: si yo conversé unas cosas con el doctor Álvaro Gómez que tuvieron trascendencia o para el proceso electoral o para la Constituyente, yo no me siento mal contando lo que yo hablé con él.

¿La verdad acaso no es un concepto totalmente subjetivo?

Sí, pero hay unas cosas que son los hechos, no todo es subjetivo.

¿El primer tomo de sus memorias qué va a tratar?

Es toda la etapa de la campaña, incluyendo la muerte de Galán. En el caso de este documento, me dediqué a revisar todo lo que publicaron EL TIEMPO, El Espectador y Semana sobre la investigación de la muerte de Galán. He encontrado hechos que son esenciales, pero que no están en la memoria colectiva, así hayan sido publicados.

En la campaña de Galán, usted era jefe de debate...

Sí. Tras su asesinato me escogieron sucesor de Galán porque me señaló su hijo y porque me eligió la organización política que estaba acompañando a Galán. Era muy difícil suceder a Galán; entonces decido hacer una campaña optimista, hablar del futuro.

Cuando mataron a Galán, ¿usted pensó que podría ser su sucesor?

Yo cuento en mis memorias algo que para mí fue una sorpresa, y fue la sensación de desconcierto y de dificultad para pensar qué iba a hacer y qué teníamos que hacer; yo estoy acostumbrado a ser una persona que enfrenta las crisis y los problemas públicos con rapidez; en ese caso, reaccioné atontadamente. La única persona que en el cementerio no entendió que lo que Juan Manuel Galán me estaba proponiendo es que fuera candidato en reemplazo de su papá fui yo. Creí que era un cumplido y me fui a dormir con esa idea en la cabeza; solo al día siguiente encontré la debida lectura.

¿Quién más aspiraba?

Samper, Hernando Durán, Santofimio, William Jaramillo y Jaime Castro.

La acusación formal que le han hecho a Santofimio, de que él instigó a Pablo Escobar para que asesinara a Galán, ¿es cierta?

Ese es un tema de los jueces que consideraron una serie de testimonios como el de 'Popeye', el del parlamentario Oviedo, el de Virginia Vallejo, quienes lo afirman. La Corte Suprema llegó a la conclusión de que Santofimio era parte del cartel de Medellín y, como tal, copartícipe de las cosas que ocurrieron.

Dentro de las investigaciones judiciales, al general Maza también lo acusan...

Según algunas declaraciones falsas, y según los testimonios, sí. Él dice que la decisión de cambiar los escoltas la tomó Manuel González; a la familia y a mí nos dijo otra cosa: que al nuevo jefe de escoltas lo había escogido él mismo y que la persona escogida le daba tranquilidad, y era de su absoluta confianza.

¿Y la versión de que fue Galán quien le pidió a Maza el cambio de sus escoltas?

Eso es lo que dice el general Maza; para la familia y para mí es una versión sin sentido. En el juicio abierto ha dicho que la campaña pidió el cambio del jefe de la escolta ¿Quién era la campaña? Yo vi el desespero de Galán porque le habían cambiado su jefe de seguridad, porque le estaban desmantelando su escolta. El señor Torregrosa, a quien nombró Maza jefe de escoltas, no le generaba ninguna confianza; al contrario, le producía temor. Y con el tiempo se descubrió que el señor Torregrosa era totalmente inexperto, un criminal, y había sido un delincuente profesional toda su vida...

¿A Torregrosa lo nombró el general Maza nuevo jefe de escoltas?

Sí, y era un delincuente que trabajó con el narcotráfico, que tuvo una pésima hoja de vida en la Policía, que estuvo un largo periodo en la cárcel en Estados Unidos por narcotráfico, que se escapó después del asesinato de Galán, que hizo parte de todo el tinglado para matarlo, que ni siquiera acompañó a Galán hasta el hospital de Bosa. Hay mucha evidencia de que el señor Torregrosa está implicado en el asesinato de Galán.

¿Quién era el jefe de escoltas antes de Torregosa?

El cambio no fue de Torregosa por Cruz. Quien era el jefe del esquema para ese momento era Orlando Forero Álvarez. Torregrosa entra por Forero el 17 de julio, y el 24 hace cambiar a Cruz. A él lo enviaron a mi campaña el día que gané la consulta popular y trabaja conmigo desde entonces.

¿Qué razón le dieron a Cruz para justificar su retiro?

Que era muy inexperto. Maza ha hablado de unos problemas conyugales de Galán y de la inexperiencia de Cruz; la verdad es que el inexperto era Torregrosa, quien nunca había protegido a una persona, quien tenía un rango en el DAS inferior al que tenía Cruz y quien tenía una carrera delictiva probada.

¿Y por qué nombró a Torregrosa?

Con el paso del tiempo y relativamente pronto se empezaron a saber los estrechos vínculos de Maza con el cartel de Cali, que es lo que de alguna manera también involucra al cartel de Cali en la muerte de Galán. Como se sabe, Maza y el general Peláez se inventaron unos asesinos: Hazbún y compañía. El Consejo de Estado ha dicho que no había una sola prueba contra ellos. Lo hicieron para distraer a la opinión.

Los vínculos del general Maza con el cartel de Cali se divulgaron con la versión de que la guerra de los carteles condujo a Maza a aliarse con Cali para lograr dar de baja a Escobar... ¿No fue así?

Mire: el embajador McNamara de los Estados Unidos en Bogotá, a los tres días de ser presidente electo me visitó y me dijo que ellos no tenían confianza en el general Maza; que él tenía muchos vínculos con el cartel de Cali.

Pero usted lo mantuvo como director del DAS. ¿Por qué?

Porque él era el símbolo de la guerra contra Escobar; sacar a Maza era como hacerle una concesión gigantesca a Escobar, y obviamente frente a una acusación que tampoco era suficientemente sólida, sino que era desconfianza, como dijo el embajador, no se podía tomar la decisión de retirarlo. Con posterioridad, cuando él sale del Gobierno, los Estados Unidos le quitan la visa. O sea que sí tenían elementos de juicio suficientemente fuertes para vincularlo con el cartel de Cali. Pasados los años, cuando vi que él adhirió a la campaña del entonces candidato Samper, en el apartamento de Alberto Giraldo, el relacionista principal del cartel de Cali, ya no me quedó duda de que los vínculos de Maza con el cartel de Cali eran estrechos, y no estoy implicando al expresidente en este episodio.

¿La publicación de estas memorias ahora se debe a que usted teme que los cambios de Fiscal y Procurador, que se aproximan, puedan alterar las investigaciones?

No. Es porque creo conveniente que la opinión pública conozca testimonios que son bastante reveladores de lo que en realidad pasó, y son bastante contundentes.

¿Usted llegó a la conclusión de que Maza estuvo vinculado con el asesinato?

No, eso es una decisión que le corresponde a la Corte Suprema, yo no puedo condenar al general Maza; pero para mí es incomprensible por qué escogió para jefe de seguridad de Galán una persona que era un delincuente.

¿Dónde está Torregrosa?

La Fiscalía lo ha estado buscando. Aparentemente, lo mataron y estaba enterrado en Santa Marta; pero no hay una sola prueba de su muerte.

¿Usted cree que el general Maza estaba enterado de quién era Torregrosa?

Es inconcebible que no. Esa era su responsabilidad. Torregrosa estuvo acusado de robo a sus compañeros; de haber matado un niño; lo destituyeron en la Aduana y en la Contraloría; estuvo en la cárcel en Estados Unidos por narcotráfico. Es imposible que Maza no lo supiera. Entonces, uno se pregunta: ¿cómo nombra a una persona así?

¿Usted por qué cree que mataron a Galán?

Porque le estorbaba a mucha gente. Obviamente, Escobar y sus compinches son los principales determinadores de la muerte. En segundo lugar, los paramilitares del Magdalena Medio participaron de manera activa. Tercero, el cartel de Cali: da la impresión de haber mandado una razón de que Escobar lo iba a matar y el destinatario de ese mensaje fue Alfonso Valdivieso. Yo creo que lo que pasó es que ellos estaban curándose en salud para que no fueran a sospechar de ellos... En el mundo delictivo ya se sabía que el cartel de Medellín había hecho una gran reunión para decidir la muerte de Galán. Los de Cali se encargaron de infiltrar y destruir su seguridad. Un grupo de oficiales de la Policía sacó a la Fuerza Pública de la plaza de Soacha, dejaron unos pocos policías, y hasta celebraron la muerte de Galán.

¿Por qué, entonces, Pablo Escobar intentó tantas veces asesinar a Maza?

Es muy difícil decirlo de manera contundente, pero yo creo que él sospechaba que Maza tenía relación con el cartel de Cali. En todo caso, Maza era su principal enemigo.

¿Pero quién mató a Galán?

Lo mataron el cartel de Cali, el cartel de Medellín, los paramilitares del Magdalena Medio, algunos políticos encabezados por Alberto Santofimio. Participaron muchos oficiales de la Policía y el general Maza, que también era oficial de la Policía, y unas personas vinculadas al B2 del Ejército.

¿Pero entonces fue una conspiración?

No es que se hayan juntado para ponerse de acuerdo, sino que Cali supo que Escobar quería matar a Galán y lo que hizo fue contribuir al asesinato, quitándole a través de Maza la seguridad a Galán. Además, hay evidencia de que a pesar de estar en guerra se reunían con cierta periodicidad para acusarse mutuamente y tratar de negociar por dinero sus diferencias.

¿De todos estos años de consulta de los medios, qué fue lo que más le impresionó?

Lo que ocurrió en la plaza de Soacha el día en que lo mataron. Como dice uno de los testigos, cuando Galán llegó a la plaza de Soacha ya estaba muerto. Todo estaba preparado para que lo mataran; 18 sicarios, varios policías, entre los pocos que había. Su escolta estaba infiltrada con los cambios que hizo Torregrosa. Había un ruido ensordecedor y todo el mundo, incluidos algunos policías, escoltas y sicarios, estaban borrachos. Hubo una vasta operación fraudulenta para distorsionar el operativo asesino. Se dedicaron a generar la impresión de que había muchas decenas de policías en la plaza. Si acaso había 10, borrachos o torcidos.

¿Dicen que el general Serna también hacía parte del complot?

Sí, eso está en investigación en la Fiscalía. Hay abundantes testimonios. Falta que se valoren las pruebas e indicios.

¿Quiénes dispararon fueron contratados por Escobar?

Sí, aunque había dos grupos de sicarios; y creo que había un tercer grupo que estaba a la salida de Soacha para atacar su vehículo si algo fallaba.

¿Qué ocurrió con ellos?

A los 18 sicarios los mataron en un par de años para no dejar ninguna evidencia.

¿Todo esto lo detalla en el capítulo que publica hoy en la web de EL TIEMPO?

Sí. Es casi increíble que haya tantos testimonios a lo largo de estos 25 años y que el país los ha ido olvidando, como haciendo un acto de escapismo. Yo me he sorprendido de la cantidad de evidencia que hay, y de lo escabrosos que son los testimonios. No solo reveladores, ¡escabrosos!

¿El jefe de seguridad de Galán?

Sí. El jefe de seguridad fue sin duda parte de la maquinaria criminal...

¿Usted concluiría diciendo qué?

Si quieren asombrarse más, entren a EL TIEMPO.COM y vean lo que han publicado los medios y está consignado en este documento.

YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO