Hay una sucesión de acusaciones contra el fiscal general de la nación, Néstor Humberto Martínez:
que está devolviendo favores de su vida pasada como abogado y asesor
ahora que es Fiscal; que tiene bienes ocultos en el exterior; que
publique su declaración de renta, etc.
Y, como si fuera poco,
exlíderes de las Farc lo responsabilizan de unirse a autoridades de los
Estados Unidos para comprometer a uno de sus miembros, Jesús Santrich,
en operaciones de narcotráfico. En medio de esta tempestad, el fiscal
Martínez ha sido objeto de seguimientos y de interceptaciones a sus
teléfonos y los de su familia. La más grave acusación en este momento es
la de tener bienes ocultos en el exterior.
"Soy un servidor público y debo responder por mi vida pasada y presente. No tengo nada que esconder. Lo
que ocurre ahora es una conspiración urdida por investigados por la
justicia. Como se ha dicho en estos días, se puso de moda el
linchamiento de operadores judiciales, como estrategia de defensa. Se va
al extremo de afirmar que la Fiscalía persigue a investigados y les
hace montajes, olvidando que quienes toman finalmente las decisiones son
jueces independientes de la Fiscalía".
¿Pero por qué habla de conspiración contra usted?
Un
fiscal que toca callos se vuelve incómodo. Nunca como hoy hay tantos
investigados y presos por corrupción. De allí que no falta quien, con
chequera larga, haya puesto en marcha una estrategia para
desprestigiarme a partir de calumnias e infamias. Así pretenden
constreñir al Fiscal, como último recurso de su defensa. ¿Puede una
sociedad permitir esto? Y eso ocurre con todos los fiscales del mundo:
perdemos un amigo todas las semanas y ganamos dos enemigos día de por
medio. Eso es propio en la investigación criminal. Lo otro sería
convertirse en una oficina de relaciones públicas.
De todos modos, ¿hay algo extraño en sus propiedades en el exterior?
He
dicho sin vacilaciones que mi familia tiene activos en el exterior.
Pero ni más faltaba que fueran activos ocultos. Le voy a mostrar a usted
los documentos del apartamento de España: esta es la escritura pública
de compraventa del apartamento, que lo adquirió la sociedad Amanda
Advisors. Cualquier persona desentendida dirá: "ah, eso está oculto
detrás de una sociedad panameña". ¡No! Para poder hacer una compraventa
de estas en España, las autoridades exigen que se declare quién es el
beneficiario real de la sociedad extranjera.
Y aquí está, usted
lo ve, un documento público que poseen las autoridades españolas, en
donde se lee que el beneficiario real es don Néstor Humberto Martínez
Neira, de nacionalidad colombiana, con pasaporte número PD048859. Por
ello no se puede decir que se oculta la propiedad a través de una
sociedad extranjera.
Quienes lo acusan dicen que la sociedad panameña tiene acciones al portador...
¡Falso!
Se sabe en el mundo entero que después de la Ley 47 de 2013, en Panamá
no puede haber acciones al portador y aquí está la certificación
panameña en donde se dice que esa sociedad, Amanda Advisors, tiene 100
acciones de su capital nominativas, no son al portador. No hay bienes
ocultos. Y mire usted, Yamid: esas 100 acciones están registradas ante
las autoridades colombianas con el nombre de mi familia. ¿Más claro?
¿Ante qué autoridades?
Ante
la autoridad cambiaria y ante la Dian. Dos autoridades a falta de una.
Es decir, frente a la tormenta que crearon con el apartamento de España,
con los papeles que le acabo de mostrar, queda claro que en las tres
jurisdicciones este asunto es totalmente transparente: en España, con
escritura; en Panamá, con el libro de accionistas; y en Colombia, ante
el gobierno mismo.
"Es un hecho: el Fiscal no tiene bienes ocultos ni en España ni en Nueva York, donde las cosas son iguales"
Es un hecho: el Fiscal no tiene bienes ocultos ni en España ni en Nueva York, donde las cosas son iguales.
Le han pedido que publique su declaración de renta, ¿por qué no lo ha hecho?
Por
una razón: mis contradictores políticos que así lo piden lo hacen de
mala fe o nunca han declarado renta. He traído mi declaración para que
usted la vea; es la primera persona que la conoce.
Podrá
advertir que en el formulario oficial de la Dian no aparece ningún rubro
dónde poner una relación de activos; entonces me dicen "presente su
declaración de renta para ver si ahí aparecen activos en el exterior".
¡Por Dios! En estos formularios solo hay un rubro de "patrimonio
líquido" donde solo caben números; no hay dónde relacionar activos, ni
casas, ni fincas. Entonces, si la entrego, van a decir: "¡ve! Ahí no
están los apartamentos".
¿Este que muestra y que veo es su patrimonio?
Claro,
aquí dice el monto de mi patrimonio. Y ese es. Pero es que están
pidiendo la relación uno a uno de mis bienes y eso no aparece en la
declaración de renta de ningún colombiano. En mi declaración, que usted
tiene a la vista, aparece mi patrimonio líquido, mis deudas, mis rentas y
lo que yo pago de impuestos.
Usted me muestra su declaración. ¿Por qué no la hace pública?
Yo
no tengo problema, por eso se la estoy mostrando. Pero en este momento
creo que es improcedente. Mis activos, mis bienes, los activos en el
exterior míos y de mi familia están todos declarados en Colombia, como
le acabo de mostrar.
Perdóneme le insisto: ¿por qué no hace pública su declaración?
Y
yo le insisto: el objetivo actual es desviar la atención. Las
declaraciones no tienen relación de activos y quieren confundir a la
opinión. Lo que importa en este momento es probar, como lo estoy
haciendo, que todos nuestros bienes en el exterior están registrados en
Colombia. Cuando se supere esta discusión no tendré problema en hacerla
pública.
Sobre el tema de las chuzadas, ¿qué es lo que está pasando?
Eso
es parte del deterioro moral del país. Aquí hay gente que se cree con
derecho a violentar la confidencialidad de las conversaciones privadas y
hay empresas que se prestan para esto. Encontramos una estructura
criminal dedicada a chuzar, a hacer seguimientos, a buscar mensajes de
texto privados, de sindicatos, de parejas, de funcionarios judiciales.
Se pretende chuzar al Fiscal e inclusive a su esposa, y los implicados
se indignan porque se abren investigaciones. ¿De verdad se puede
patrocinar la impunidad en un caso de estos?
¿A usted lo chuzaron?
Esas
son las pruebas que el fiscal del caso ha llevado ante los jueces y
todos los jueces, sin excepción, han reconocido que hay evidencias
razonables.
¿Y cómo es la historia de que hubo seguimientos cuando estuvo en España?
Hay textos públicos de mis desplazamientos; había personas siguiendo mi presencia en ese país.
¿Su visita tuvo que ver con el caso de la triple A?
Sí,
así es Yamid. Varios españoles y varios colombianos defraudaron el
patrimonio de la empresa barranquillera y se llevaron, a través de un
contrato inexistente de prestación de servicios, más de 236.000 millones
de pesos. Estamos trabajando con la Fiscal de España para que paguen
los responsables. Y nos corresponde asegurar que dineros mal habidos no
se queden en bolsillos privados.
En medio de la tempestad, el
señor Iván Márquez lo acusa de 'sembrar en la Jurisdicción Especial para
la Paz minas contra el proceso de paz...'.
Nada más inexacto.
En el acuerdo que él firmó dijo expresamente que si los exguerrilleros
volvían a cometer delitos después del 1.° de diciembre del año 2016, su
investigación sería de la justicia ordinaria. Entonces aquí lo que está
fallando es la memoria. Entre otras razones, porque si los reinsertados
hicieron tránsito a la vida civil tienen la condición de ciudadanos
ordinarios y hoy, en Colombia, si un ciudadano comete un delito es
investigado por la justicia ordinaria, por la Fiscalía, como todos los
colombianos, sin perjuicio de que los delitos que cometieron en el
conflicto vayan a la Jurisdicción Especial para la Paz.
Y la acusación de que la Fiscalía fabricó un montaje contra Santrich...
Ahí
están las pruebas. Esta semana entregué a la JEP 12 audios en donde hay
prueba fonográfica de la estructuración de un negocio de narcotráfico
en el que se escuchan claramente las voces de los implicados.
"Esta semana entregué a la JEP 12 audios en donde hay prueba fonográfica de la estructuración de un negocio de narcotráfico en el que se escuchan claramente las voces de los implicados"
Yo tengo la obligación
moral, judicial y política de mostrarle a la nación que esto no es un
montaje del que algunos hablan y por eso he tomado la decisión de hacer
públicos esos audios.
¿Cómo y cuándo lo va a hacer, Fiscal?
Me
parece que sería indebido hacerlo en este momento en el que la JEP está
evaluando el caso. No faltaría quien considerara que sería una forma de
interferir en su decisión. Pero después de que la JEP se pronuncie, por
razones de interés general, haré públicos estos audios. Asumo ese
compromiso para que la historia de Colombia jamás valide la tesis, esa
sí prefabricada, de que esto es un montaje entre el Gobierno de los
Estados Unidos y el Fiscal.
La gran duda está en la fecha en que se habría realizado el supuesto negocio...
Las
fechas de los audios están entre el 2 de agosto del año 2017 y el 8 de
febrero del año 2018, todas posteriores a la firma del acuerdo de paz.
¿Y cómo se confirma la fecha, señor fiscal?
Porque
todas son pruebas recaudadas por la Fiscalía que cumplen con protocolos
técnicos que evidencian la fecha de las mismas. Además, son
interceptaciones legalizadas ante jueces. Doce audios que he entregado
son interceptaciones de Fiscalía
Entonces, ¿ustedes estaban detrás de Santrich?
No.
Estábamos protegiendo los recursos de la salud y del posconflicto y
encontramos un personaje sinuoso que aparecía en actividades ilícitas
que se llamaba Marlon Marín y al seguir sus actividades apareció el
narcotráfico. Debo reconocer que me causó un profundo desconcierto, como
amigo de la paz.
Supongamos que la JEP decide que no hay
manera de confirmar la fecha en que hubo la supuesta negociación de la
droga con un agente encubierto de la DEA...
Esa hipótesis
realmente no cabe porque el Gobierno americano y la Fiscalía hemos
facilitado evidencias para que la JEP no tenga dudas. Tengo profunda
confianza en la JEP; esa decisión la van a tomar magistrados de la
República y ellos tienen que producir su decisión con base en la ley y
las pruebas que les han sido aportadas.
Usted dice que no va a
revelar los audios porque no quiere que lo acusen de interferir en
decisiones que va a tomar la JEP. ¿Pero decir que va a revelar los
audios no es una especie de amenaza a la JEP?
No, de ningún
modo. De hecho, es un tema del que he informado a la presidenta de la
JEP. La difusión de los audios no depende del sentido de la decisión,
sino de la necesidad de que el país pueda contar con elementos objetivos
para la historia acerca de este delicado episodio, que está tan
estrechamente ligado a la paz.
Que no se diga que se está
desportillando la paz por una acción de la justicia y que, más bien, se
miren responsabilidades en cabeza de aquellos gestores que desde la
orilla de la desmovilización no honran su palabra del acuerdo y tomaron
las de Villadiego.
¿Usted no tiene ninguna duda sobre la autoridad de la JEP?
Ninguna,
nunca la he discutido. Merece todo mi respeto. Por ello mismo, cuando
supe de la exigencia de copias de su primera investigación, me anticipé a
exigir que se revocara esa decisión, que me pareció invasiva.
Si Santrich es hallado responsable por la JEP, ¿no peligra la paz?
Yo
no creo, porque eso fue lo que firmaron Márquez y Santrich en La
Habana. Firmaron que aquel que delinquiera con posterioridad al 1.° de
diciembre del 2016 estaría sujeto a la jurisdicción ordinaria y podría
ser objeto de extradición. Ese acuerdo lo honramos todos los
colombianos, al punto de que adquirió categoría de norma constitucional
en el artículo 19 del acto legislativo n.° 1 del 2017. Resultaría
irónico que por aplicar el acuerdo de paz se acabe el proceso.
¿Marín está hablando de Márquez en Estados Unidos?
El
señor Marín ha dicho a la Fiscalía que se reserva el derecho de no
incriminar a sus parientes, y ese es un derecho constitucional, por eso
hemos dicho con claridad que la Fiscalía no tiene ningún testimonio de
Marín contra el señor Iván Márquez.
¿Contento en la Fiscalía después de estos dos años?
Es todo un desafío y se ven los resultados. Pero... ¡dejen trabajar!
YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO