La ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, decidió este año anticipar el regalo de la Navidad. En la siguiente entrevista para EL TIEMPO revela que su despacho estudia con el Ministerio de Hacienda cómo puede realizarse una "desindexación" de los arriendos de vivienda.
El siguiente es el diálogo de este cronista con la ministra Ramírez, graduada en física y matemáticas, y magíster en desarrollo educativo y social.
¿Qué significa para el Ministerio del Trabajo la baja del índice de precios al consumidor?
Es muy importante porque es la inflación más baja desde el año 2021, o sea, esto significa que tenemos un mayor aumento real del salario en términos generales.
Es decir...
Significa que debemos trabajar para desindexar muchos más bienes y productos, para de esta manera también potenciar y proteger ese valor adquisitivo que va a permitir que haya una mayor reactivación económica a medida que aumenta la capacidad de compra de los sectores trabajadores. Así vamos reactivando mucho más la economía. Esto significa que vamos por buen camino, no al paso que quisiéramos, pero vamos por buen camino.
¿Qué significa la afirmación suya de que se mantiene el valor adquisitivo?
Es darle capacidad de consumo a la gente y con ello reactivamos la economía.
La reactivación fundamental es de la agricultura...
El sector que más ha contribuido a este bajo índice ha sido el sector de la agricultura. Ha crecido en 10,7 por ciento este año, cosa muy satisfactoria.
Y también crece el turismo, ¿no?
Hemos tenido un crecimiento del turismo del 15 por ciento; tenemos que seguir trabajando para que tengamos reconversión laboral, para que ampliemos y aumentemos la productividad haciendo inversión tecnológica en maquinarias, inteligencia artificial, robótica, bioeconomía. Es decir, estos son elementos que juegan un papel muy importante en el aumento de la productividad, que también es un factor que este país tiene como un gran desafío en los próximos años.
¿Qué es lo que origina el crecimiento de la agricultura?
Está a la baja el costo de los fertilizantes. Además, hemos comprado las cosechas. El Gobierno tiene toda una línea de crédito donde el Estado es el garante, y hemos hecho un acompañamiento técnico y un apalancamiento financiero del sector del campo. Hay una incertidumbre que puede estar generada en el cambio climático. Es decir, si el fenómeno de La Niña se potencia más, si hay inundaciones, si las cosechas se afectan, pues vamos a tener allí un factor que nos tiene que poner en alerta.
¿Y nos estamos preparando?
Tenemos unas estrategias y medidas para las eventualidades de que efectivamente la acción climática pueda incidir en el campo. Hasta ahora, las políticas que tenemos de desarrollo tecnológico del campo, de acompañamiento técnico y de apalancamiento financiero van por buena senda.
Usted va a tener que enfrentar como titular de trabajo la relación con los sindicatos y los trabajadores. ¿Qué va a hacer?
Todos los años tenemos ese debate. Está la posibilidad de construir la cifra de manera conjunta. Yo quiero recordarles que en el 2022 estuvimos en unas distancias gigantescas y, después de conocer todos los indicadores y todos los insumos que se le suministraron a la comisión, logramos un acuerdo. El año inmediatamente anterior, el 2023, contribuyó enormemente a que el salario tuviera un crecimiento real y hacia allá es donde nosotros queremos dirigir la política laboral.
Como ministra del Trabajo, ¿usted piensa que el aumento del salario del año entrante será de un solo dígito?
Bueno, todavía no me atrevería a dar esos pronósticos porque hoy tenemos un piso que nos pone en varios escenarios. Un escenario que podría uno pensar es productividad más el IPC, pero, como te digo, hay cuatro datos de productividad con los que la comisión tiene que tomar una decisión y esa decisión puede ser tomar la productividad del trabajo que es 3,43 o puede tomar la productividad por persona empleada que está en el 1,76 o puede tomar el promedio de productividad que es de 3,14 o puede tomar la productividad total de los actores que es de 1,73. O sea, hay cuatro cifras sobre las cuales la comisión debe elegir y esto lo tiene que acompañar también con las variedades macroeconómicas, que tienen que ver, así mismo, con la contribución al producto interno bruto que puede ser la del trabajo o puede ser la general como tal. O sea, estos datos los tendremos totalmente mañana lunes, cuando el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda se los le entregarán a la comisión.
Pero, usted como ministra, ¿qué opina de las opciones mismas que usted ha planteado?
Lo que sí le puedo decir con certeza es que la voluntad política del Gobierno es avanzar en los procesos de diálogo y concertación y hasta el momento tenemos también la voluntad política expresada por los diferentes sectores que están en la mesa de concertación de avanzar hacia un acuerdo. Esto lo podremos decir en definitiva el próximo 11 de diciembre, que es cuando se pondrán las propuestas sobre la mesa. El sector empresarial hará sus propuestas con todo este proceso de una cifra y los sectores de trabajadores también darán una cifra de acuerdo con la manera como ellos interpretan estos insumos que se han dado. Y el Ministerio tendrá toda la voluntad para buscar los acercamientos necesarios porque el mejor mensaje para el país será el que haya un acuerdo tripartito para la construcción de la cifra en sala de unión.
¿Y por qué es tan grande la diferencia entre las cifras del Dane y las aspiraciones de los trabajadores? ¿Cuál será la posición suya?
Siempre tratar de acercarnos para que efectivamente la cifra que nosotros trabajemos sea la cifra que mejor satisfaga las necesidades de los sectores trabajadores de este país.
¿Eso qué significa?
Eso significa que trabajaremos para que la cifra que tengamos acompañada de las medidas de desindexación protejan el valor adquisitivo de los salarios.
¿A qué llaman esas medidas de desindexación?
Las medidas de desindexación es desatar el valor o el alza de los precios o del IPC del aumento del salario mínimo. Por ejemplo, las multas. Una multa no tiene por qué estar atada al valor del salario mínimo. Por ejemplo, los medicamentos tampoco deben estar atados al valor del salario mínimo. Y así nosotros tenemos 188, entre bienes y servicios. Este año yo les pido que podamos llegar a 200 artículos entre bienes y servicios para desindexar y esto contribuye mucho más a disminuir el costo de la canasta básica de este país.
Usted mencionó los medicamentos, ¿qué otros productos se generan?
Tenemos fertilizantes, medicamentos, multas. Son 18 sectores de la actividad económica donde podemos encontrar bienes y artículos para desindexar. Y canasta familiar. Todavía no hemos encontrado los elementos que nos permitan desindexar el costo, por ejemplo, de los arriendos que tienen un peso importante en el valor de la canasta básica. Tenemos una comisión que está trabajando para ver la forma de desindexar los costos de la vivienda.
¿Los arriendos serán congelados?
Estamos trabajando en medidas para ello, pero todavía no tenemos una decisión,
¿Cómo sería la indexación en el tema de arriendos?
Estamos trabajando, pueden ser los porcentajes, la UVT, que es la unidad de valor tributario y que también podemos transformarla. Ahora nosotros tenemos un equipo que ya está conformado con el Ministerio de Hacienda. Y estamos llamando ya al Ministerio de Vivienda para mirar qué posibilidades tenemos y cómo podríamos hacer la desindexación de este factor que es tan importante y que pesa mucho todavía en la canasta familiar.
La Corte Constitucional ordenó que el alza del salario mínimo no puede ser inferior a la inflación, que se calcula este año en 4,4 por ciento, más productividad, que será de 1,7 por ciento. Es decir, 6,1 por ciento. ¿No será de ninguna manera de dos dígitos el alza del salario mínimo?
Los parámetros legales y constitucionales son respetados y todas las partes de la Comisión Permanente de Concertación aprobaron la metodología presentada por el Centro de Estadística, entre ellos las cifras en materia de productividad, y también sobre la inflación. Con el rigor con el que ha trabajado el Dane más otros insumos técnicos con los que contaremos la próxima semana, nos permitirán desde el diálogo tripartito construir la cifra de incremento al salario mínimo teniendo en cuenta que la ley exige garantizar la calidad de vida digna para los trabajadores.
¿Ve ambiente para que este año se logre una concertación en torno al reajuste del salario mínimo?
Este año valoro la disposición de diálogo de las partes, el ambiente de la Comisión Permanente es de respeto de las diferencias. El Ministerio del Trabajo y el Gobierno harán todos los esfuerzos para motivar la concertación.
¿Cree necesario un acuerdo entre trabajadores y empresarios, sobre el alza de salarios? Las posiciones están muy distantes...
Hoy no hay posiciones, esto solo sucederá hasta el próximo 11 de diciembre de conformidad con el calendario que aprobó la Comisión Permanente, entre tanto continuaremos analizando todos los aspectos técnicos que nos permitan generar ese diálogo tripartito sobre el incremento al salario mínimo 2025. Los cálculos rigurosos y objetivos del Dane nos muestran una PTF (productividad total de los factores) de 1,73 por ciento, muy cerca de esta cifra está la productividad laboral por empleado de 1,76 por ciento. La productividad laboral por hora trabajada se sitúa en 3,43 por ciento. Finalmente, la productividad media laboral es de 3,14. Una vez se tengan las perspectivas macroeconómicas para 2025 por parte del Banco de la República y el Ministerio de Hacienda, las partes presentarán sus propuestas de aumento salarial y sabremos qué tan distantes están las posiciones.
¿Usted cree que un aumento generoso del salario mínimo podría afectar la generación de empleo? O, al contrario, ¿estimularía el crecimiento?
A medida que se ha reactivado la economía, la ocupación muestra una tendencia creciente y el desempleo una tendencia decreciente. Mientras exista mayor capacidad adquisitiva, más se va a mover la economía.
¿Usted piensa regresar al Senado de la República?
Mis pensamientos están concentrados en lograr el cumplimiento de un programa de gobierno progresista. Y lo estamos haciendo bien. Los datos dan cuenta de que este gobierno ha sacado de la pobreza a alrededor de millón doscientas mil personas. Las recientes cifras del Dane respecto de la pobreza monetaria indican que vamos por buen camino: pasamos de un 36,6 por ciento a un 33 por ciento en 2023, y tratándose de pobreza extrema de un 13,8 por ciento a un 11,4 por ciento.
Yamid Amat