Óscar Iván Zuluaga acepta síntomas de preocupación expuestos por el editorial de EL TIEMPO. No es partidario de un alza en las tasas de interés.
El Ministro de hacienda, Óscar Iván Zuluaga, decidió lanzar un mensaje de tranquilidad sobre la economía del país y sus perspectivas. No solamente no ve graves amenazas, sino que enfrenta a sus críticos y les pide mirar bien las cifras de nuestra marcha económica.
¿Cuál es su posición sobre la reiterada petición del banco de la república al gobierno para que frene el gasto?
En el 2007 y eso no ocurría desde 1992, obtuvimos superávit primario en el gobierno central del 1 por ciento; pasaron 15 años para que Colombia volviera a tener un superávit en las finanzas del gobierno nacional y eso quiere decir que está gastando menos.
Lo que pasa es que el gasto público en Colombia tiene temas rígidos: Los ingresos tributarios para el 2008 están proyectados en 66 billones de pesos y esos ingresos se van en cuatro cheques: pensiones, intereses de la deuda, transferencias a las regiones y nómina de empleados para pagar el funcionamiento del Estado. Pero resulta que no es posible disminuir la inversión social o la inversión en infraestructura porque el país, en esos dos campos, tiene un déficit muy grande.
El gobierno debe buscar, pues, una buena economía, pero que también haya avances sustanciales significativos en menores niveles de pobreza y en mayor desarrollo de infraestructura.
¿Entonces no puede haber apretón en gasto público?
Claro que sí y ya lo hay. Está previsto un crecimiento nominal de la economía del 9,2 por ciento y un crecimiento de los gastos del 6,3 por ciento, excluyendo defensa y seguridad, que está financiada con el impuesto al patrimonio; en el año 2008, recogeremos tres cuotas de ese impuesto y vamos a gastar cuatro cuotas. ¿Cuál es la cuarta? La que habíamos recogido en el año 2007; eso va a generar un mayor déficit.
¿Tendrá que venir algún ajuste tributario?
No, ese gasto esta financiado con el impuesto al patrimonio. Lo que nos hemos propuesto es una mejora sustancial de la Dian, darle más herramientas para poder mejorar la eficiencia de su recaudo.
El TIEMPO advirtió en reciente editorial que "vientos externos preocupantes, menor consumo interno, inflación, déficit fiscal, sugieren un descenso moderado en la economía en el 2008". ¿Usted lo cree así?
Nosotros anticipamos eso desde cuando presentamos el presupuesto; fuimos los primeros en advertir una moderación del crecimiento económico y en anticipar que el crecimiento económico en el 2008 sería del 5 por ciento, menor al del 2007.
¿Cuál es su objetivo frente al déficit fiscal?
Quisiéramos tenerlo en una línea del 2 y medio por ciento. Estamos a un punto. Esa meta supone que los gastos crecerán, pero menos de lo que crecen los ingresos y la economía. Buscaremos tener mucho más moderación en los gastos.
¿La venta de grandes empresas no supone empobrecer al estado?
Con esos recursos estamos ahorrando intereses de por vida, porque con eso pagamos deuda.
Pero se perdieron empresas muy rentables...
Siguen tributando. Generan mucho más por los impuestos que pagan, son más eficientes y crecen mucho más.
¿ Le preocupa el alto crecimiento del consumo de los colombianos?
El consumo privado está creciendo un promedio del 7 por ciento; el consumo público crece al 3 por ciento. Eso puede traducirse en una presión muy fuerte sobre los precios y eso se está ajustando. El país alcanzó tasas de crecimiento del crédito de consumo anual del 50 por ciento; hoy están al 33 por ciento.
¿ Cree necesario seguir aumentando las tasas de interés?
Espero que no, que nos estabilicemos en los niveles que hoy estamos y dar esa señal de tranquilidad porque estamos en un proceso de expansión de la economía.
¿ Un nuevo aumento en las tasas golpearía ese crecimiento?
Creemos muy importante dar estabilidad para poder seguir avanzando en esa senda de crecimiento económico. Un nuevo aumento en las tasas, empezaría a complicar muchísimo la dinámica de la inversión, los diferenciales con las tasas internacionales pueden traer problemas adicionales de revaluación.
¿ Por qué fracasamos en el cumplimiento de la meta de inflación?
En la junta del Banco de la República no se pueden tampoco hacer milagros. No se puede controlar, por ejemplo, el clima y su efecto sobre los precios de los alimentos ni se puede imponer un freno al precio internacional del petróleo. Hay factores exógenos incontrolables. No cumplimos la meta pero logramos una de las inflaciones más controladas de América latina; el mundo hoy vive un problema de inflación muy atado al tema de precios del petróleo.
El crecimiento de los precios del petróleo aumenta los precios de la gasolina y del Acpm y eso eleva los precios del transporte de carga que, a su vez, dispara los precios de los alimentos. ¿Qué piensa hacer?
Habrá que extender el subsidio a los precios de la gasolina. Estamos dispuestos a revisar el tema del reajuste en combustibles. Eso es algo que tenemos que monitorear de acuerdo a la evolución que tengan los precios del petróleo.
¿De qué manera nos afectaría una recesión en Estados Unidos?
Si cae la economía americana, habrá menos demandas por nuestros productos. Eso golpearía nuestras exportaciones si no encontramos otros mercados.
¿ Cómo piensa enfrentar el déficit en materia comercial?
Piense que por la dinámica del crecimiento económico y la inversión, el 50 por ciento de las importaciones son materias primas y bienes de capital.
Sus críticos dicen que usted está empecinando en desestimar las amenazas que se ciernen sobre la economía colombiana y se contenta con una reducción del déficit fiscal a expensas de las finanzas territoriales y mediante el uso de lo que sus mismos contradictores llaman "trucos contables" y "maquillaje" de las cifras, las cuales aun así, muestran resultados considerados "modestos" en cuanto a la reducción del desequilibrio de las finanzas....
El Ministro de Hacienda no hace trucos contables. Lo que mostramos son verdades fiscales. A mis críticos les cuesta reconocer la realidad. Muchos de ellos han estado en épocas en gobiernos anteriores y las cifras que mostraron no son tan buenas como las que tenemos hoy.
¿ La prosperidad económica del país no está amenazada?
No, el país tiene un nivel de crecimiento importante y sólido, un crecimiento que está sustentado en inversión y en la confianza internacional en el país, en su economía, en su estabilidad y en su gobierno.
¿ No hay nubarrones?
Siempre en economía hay dificultades; hay el riesgo de una desaceleración en la economía americana, que significa incertidumbre y volatilidad en los mercados financieros; nadie sabe que pueda seguir pasando con el precio del petróleo, en el mundo hay un brote inflacionario tremendo de alimentos, pero los fundamentos de la economía colombiana hoy son muy sólidos.
¿ Usted no ve inminencia de época de vacas flacas?
No. Vamos a mantener un buen ritmo de crecimiento económico y esta bonanza de inversión que tiene Colombia se va a sostener.
¿Estamos llegando a niveles peligrosos de endeudamiento?
¡ Cómo le parece lo que hemos hecho en deuda! ¿Sabe cuánto debíamos en el 2002? 48 por ciento del PIB. ¿Sabe en cuanto terminó el año pasado? 28 por ciento! Si la economía tiene un crecimiento nominal del 9,2 por ciento en nuestra proyección la deuda sólo crecerá el 6 por ciento.
¿Cuál es el origen del crecimiento de la economía colombiana?
La inversión. Cuando empezó este gobierno en el 2002, la inversión era el 13 por ciento del PIB; el año 2007, cerramos en el 28 por ciento y este año aspiramos a conservarlo. El año pasado la inversión extranjera fue un récord: llegamos a 7.500 millones de dólares, nos acercamos al 5 por ciento del PIB. Es la segunda más alta en América latina, después de Chile..
¿La balanza comercial seguirá siendo deficitaria?
Sí. Habrá un componente que la hará crecer mucho, que es la importación del equipo militar por 1.600 millones de dólares.
¿No son preocupantes sus anuncios de que va a seguir creciendo el déficit fiscal, crecerá mas el déficit comercial y que nos vamos a endeudar para cubrir esos valores negativos?
¡Por Dios! Vea lo positivo: Es una economía que crece, que produce confianza, una economía que tiene la más alta tasa de inversión privada, una economía que tiene una inflación de las más bajas en América latina. ¿Usted cree que alguien viene a invertir en Colombia si las señales fueran preocupantes? No. Véalo en ese contexto. ¿El déficit en cuenta corriente va a crecer el año entrante? Sí. Pero vea por qué crece y cómo se financia. Tenemos claro que los orígenes de esas cifras, son nuestro crecimiento y la expansión de nuestra economía. Y tenemos claros los instrumentos de financiación de esos faltantes.
¿Con deuda externa?
Claro; el déficit se financia con deuda; si usted no tiene los recursos, tiene que endeudarse. La ventaja es que el país tiene unos niveles de deuda moderada que le permiten aumentarla, sin comprometer las finanzas públicas y sin afectar los equilibrios macroeconómicos.
El indicador de Colombia en deuda era 48 por ciento del PIB en el 2002; hoy es el 28 por ciento, que no es, de ninguna manera, alarmante. El gobierno no está haciendo cuentas alegres; el gobierno ha diseñado una estrategia de política fiscal que es coherente y ha tomado decisiones responsables.
¿El peso tiene hoy un valor que no es real?
No, lo que puede haber detrás de la revaluación, es una economía con signos de fortaleza; tenemos una moneda mucho más apreciada, revaluada, porque tiene unos fundamentales económicos mucho más sólidos; nuestros activos en pesos valen mucho más y el poder adquisitivo del peso es mayor. Los salarios, por ejemplo, han sido beneficiados porque tienen un valor real mayor.
¿Qué pasó con lo de Granahorrar?
Todavía quedan unas instancias judiciales, recursos ante el mismo Consejo de Estado y seguramente ante la Corte, a través de una tutela.
¿Y que va a hacer si todo se confirma?
Pues pagar...
El balance de este entrevista es: ¿no seamos pesimistas?
Las cifras son contundentes. Hoy Colombia tiene fiebre inversionista, reconozcamos que el país ha dado avances muy importantes, que la economía va muy bien, a pesar de que se incorporan las dificultades que hoy se pueden vislumbrar en la economía internacional...
Mejor dicho: ¿no nos asustemos con lo que puede venir?
Hay que estar siempre atentos, pero el país va bien, la economía va muy bien; una prueba del buen manejo de la economía son los flujos de inversión extranjera, que llegan cuando un país tiene solidez en el manejo económico y eso es lo que está mostrando Colombia...
¿Siente que nuestra economía está blindada?
La hemos mejorado mucho. Esta mejor blindada que en la década de los 90; tenemos más solidez y más capacidad de reacción. Colombia es un país que va muy bien, es un país que irradia confianza, hay razones para ser optimistas. La política económica del gobierno hoy es seria y permite tener mucho más tranquilidad para enfrentar dificultades y amenazas externas.
¿Nuestra estructura económica esta amenazada?
Reitero: No.