'Fue recuperado el 93% de los ahorros e inversiones en Interbolsa'

Un año después de estallar el mayor descalabro financiero y bursátil en la historia del país, la crisis de Interbolsa, el superintendente de Sociedades, Luis Guillermo Vélez, revela que del total de 9 billones de pesos que administraba la holding, solo están hoy en riesgo de recuperarse 600.000 millones de pesos. Es decir, el 6,6 por ciento.

Todos los demás bienes, títulos o inmuebles, inversiones en el país y en el exterior se recuperaron. Los 600.000 millones de pesos en riesgo están casi exclusivamente representados en colocaciones en el Fondo Premium y en dos carteras colectivas.(Lea también: Interbolsa: justicia en lo económico, pero no en lo penal).

Vélez, quien ejerce como Superintendente desde hace tres años, hoy destaca cómo la gestión “oportuna, contundente y eficiente del Gobierno ante la crisis” salvó a la nación de la “hecatombe que habría podido ocurrir, si no se logra lo que se hizo: aislar el sector en crisis, blindar a la bolsa y evitar el contagio”.

Fue el primero de noviembre, hace un año, cuando el representante legal de Interbolsa comisionista informó que la firma no estaba en capacidad de pagar un crédito vencido por 20.000 millones de pesos otorgado por una entidad financiera. La Superintendencia Financiera ordenó la toma de posesión inmediata de los bienes, haberes y negocios de la sociedad comisionista. Y estalló la crisis.

Interbolsa comisionista manejaba cerca de 30 por ciento del mercado público de valores de Colombia y su quiebra puso a temblar a decenas de sociedades y entidades que tenían vínculos comerciales con la comisionista y con el grupo Interbolsa.

“En el momento del colapso administraba 9 billones de pesos. Pero hoy el dinero en riesgo es aproximadamente 600.000 millones de pesos, contenidos en tres bloques: la comisionista, la holding y Premium”.

Es decir, ¿más de 8,4 billones de pesos fueron recuperados y están a salvo?

Sí. Había por ejemplo 2,5 billones de pesos en TES, que se movieron a Bancolombia. Cerca del 98 por ciento de 2,1 billones de pesos que administraba la SAI también están a salvo. Eran 16 carteras colectivas. Catorce se distribuyeron en diferentes comisionistas. Solo quedaron dos en problemas –Credit y Factoring–, y en ellas la mayoría del dinero está seguro.

¿La pérdida final por parte de los ahorradores será entonces mínima?

Hay 600.000 millones en riesgo, pero tenemos activos que podrían valer 400.000 millones, aunque todo depende del valor final de la acción de Fabricato.

¿Por qué me dice que el escándalo se divide en tres bloques?

Sí. Primero, la liquidación de la holding, Interbolsa S.A; segundo, la liquidación de la comisionista y tercero, la intervención de Premium.

Comencemos a desglosar la operación. ¿Cuánto se debe en el primer bloque?

260.000 millones de pesos. En esa suma están quienes invirtieron en unos bonos emitidos en Luxemburgo por 88.000 millones. Unas 300 personas, entre ellas viudas, pensionados, congregaciones religiosas y universidades.

¿Qué activos hay para pagar en ese primer bloque?

163.000 millones de pesos, que incluyen 93.000 millones en cuentas por cobrar. También hay acciones de Coltejer, de Fabricato y una participación en EasyFly.

¿Cuánto se recuperará en cuentas por cobrar?

El liquidador está haciendo todo su trabajo, pero la verdad no es muy optimista porque gran parte de la cartera por cobrar está en cabeza del denominado ‘grupo Corridori’, al cual le prestaron unos 87.000 millones de pesos. Vale la pena aclarar que este ‘grupo’ también le debe a la comisionista y a Premium. Así pues, el liquidador espera recuperar unos 10.000 millones.

¿Y en caja cuánto hay?

Producto de las ventas de activos como Acercasa e Interbolsa Panamá, se han logrado recuperar cerca de 10.000 millones.

Pasemos al segundo bloque: la comisionista.

Allí se nombró un liquidador por parte de Fogafín. Ya se ha devuelto más del 90 por ciento. Sin embargo, hay un pasivo importante de 75.000 millones de pesos relacionado con repos sobre acciones de Interbolsa.

¿Esos 75.000 millones de pesos no son recuperables?

Son de difícil recuperación porque la garantía eran acciones de Interbolsa, y hoy esas acciones valen cero. Y ya dependerá de la voluntad de los accionistas responderles a quienes prestaron recibiendo como garantía acciones de Interbolsa.

¿Y el tercer bloque?

Es el más complejo. Tiene que ver con el grupo Premium de Curazao, donde hay reclamaciones de 1.058 personas por cerca de 164 millones de dólares.

¿Qué activos hay para pagar a los afectados de Premium?

En el bloque de Premium ya hay 70 millones de dólares, discriminados así: 8 millones en Curazao, 22 millones en Panamá y activos por unos 40 millones en Colombia. Pero esa cifra puede ser mayor si la acción de Fabricato sube de precio.

¿También hay embargos que pueden servir?

Claro. Como en el bloque de Premium hay una intervención por captación ilegal, se han hecho embargos de activos personales muy valiosos de Víctor Maldonado, Tomás Jaramillo y Juan Carlos Ortiz, quienes de paso eran accionistas de Interbolsa. Esos activos incluyen acciones del hotel Santa Clara en Cartagena, la participación en la Pizzería Archie’s, fideicomisos del hotel Ibis y un número significativo de fincas, apartamentos, lotes y automóviles. Esos bienes irían a llenar la diferencia entre los 70 millones de dólares que hay y los 164 que se deben. Todo este proceso se logra tras la intervención a más de 20 personas naturales y 26 sociedades en Colombia y en el extranjero.

¿Cuáles son las mayores dificultades que ha encontrado?

Primero, la compleja y sofisticada estructura desde el punto de vista financiero. Entre Interbolsa y sus vinculados había más de 50 sociedades, todas identificadas. Segundo, toda esta maraña de sociedades estaba ubicada en varias jurisdicciones: Panamá, Estados Unidos, Bahamas, Curazao, Luxemburgo, Brasil y Colombia.

¿Y las acciones y tutelas de los abogados de Interbolsa?

Esa es otra de las dificultades. Innumerables maniobras dilatorias por parte de los abogados. Se ha intentado tender toda clase de obstáculos para que no se pueda avanzar. Han lanzado cortinas de humo, incluyendo acusaciones temerarias, tutelas, nulidades, etc. Solo en el caso Premium hemos enfrentado 13 tutelas. Algunas de ellas han llegado a la Corte Suprema de Justicia y se han fallado a favor nuestro.

¿Dijo usted “acusaciones temerarias”?

Sí. Acusaciones ante los entes de control con el ánimo de intimidar a funcionarios y dilatar el proceso. Por fortuna, estamos trabajando coordinadamente con la Fiscalía, la Procuraduría, la Contraloría y la Superfinanciera para dar una solución a las víctimas de esta debacle.

¿Qué objetivo han tenido las que llama “maniobras dilatorias” de los abogados?

En una liquidación, lo más importante es conservar los activos, porque van a ser fuente de pago de los acreedores; una vez asegurados, hay que identificar a quién se le debe la plata. Entonces, entre más tiempo pasa, más oportunidades hay para desviar los activos y desvalijar las compañías.

¿Eso ocurrió?

Por lo menos lo intentaron. Pero se aseguró un número importante de activos.

¿Y qué puede ocurrir con las operaciones realizadas por Interbolsa o Premium para ocultar activos o desvalijarlos?

Si hay activos desviados ilegalmente, las operaciones podrían ser revocadas.

¿Pero sí hubo?

No quisiera hacer esa calificación en esta entrevista, pero los liquidadores han manifestado públicamente que van a iniciar acciones revocatorias sobre bienes que al parecer fueron extraídos ilegalmente de las compañías.

Usted acaba de regresar de Curazao, en donde sostuvo una reunión con autoridades de ese país. ¿Qué conclusiones trae?

Se está buscando desmontar la estructura Premium del exterior y traerla a Colombia. Para eso trabajamos con el Banco Central de Curazao.

¿La totalidad del dinero depositado por ahorradores en Premium está en riesgo?

Hay 164 millones de dólares (unos 300.000 millones de pesos). Eso hace parte de los 600.000 millones de pesos que le mencioné.

¿Y los 164 millones de dólares de Premium dónde están?

Premium invirtió buena parte del dinero en acciones de Fabricato. Esas inversiones se dieron con la acción cercana a los 72 pesos. Al caer a 10 pesos aproximadamente, hubo una pérdida de valor significativa.

¿Quedó claramente confirmado que el dinero que los colombianos depositaron en Premium regresaba a Colombia para comprar Fabricato?

Sin duda alguna. Y hubo operaciones directas que permiten establecer una captación ilegal. La plata a veces ni siquiera iba a Curazao sino que entraba directamente a cuentas en Colombia y para financiar actividades especulativas.

Un año después del escandalo, ¿qué se ha hecho para sancionar la irregularidad?

La gente dice: queremos que se haga justicia en el caso Interbolsa, y es una petición legítima. ¿Pero qué tipo de justicia: la civil o la penal? A la Supersociedades le corresponde la justicia civil. En esto quiero ser muy enfático: es imposible haber actuado con más rapidez, con más contundencia y con más resultados que los registrados en este año. Se ha hecho en tiempo récord, considerando las dificultades, la complejidad, el monto de activos involucrados. La justicia penal le corresponde a la Fiscalía, y doy fe del trabajo serio, coordinado y sofisticado que ha venido adelantando tanto en la operación de Fabricato como en las relacionadas con la captación ilegal de Premium. Sé que el país tendrá los resultados que espera.

¿Cuándo se va a comenzar a devolver el dinero recuperado?

En el caso de la holding, en el primer trimestre de 2014 se empezarán a pagar las obligaciones reconocidas en la liquidación, entre estos los 88.000 millones de pesos relacionados con las inversiones en Luxemburgo. En el caso de la comisionista, está cerca de concluir la devolución. Y en el de Premium, antes de finalizar el primer semestre de 2014 estimamos que se den los primeros pagos.

¿Qué destacaría usted del manejo que se dio a la crisis de Interbolsa?

Lo más importante es algo que nadie le ha reconocido al Gobierno y es que en noviembre de 2012 se evitó lo que pudo haber sido una grave crisis del sistema financiero porque Interbolsa era un operador sistémico. Su colapso hubiera podido contagiar a otras entidades sanas, y los daños hubieran sido mayores. Esto se evitó debido a la diligencia, la oportunidad y la efectividad en la acción gubernamental.

¿Y la Bolsa Mercantil?

“La Bolsa Mercantil estaba en poder de Interbolsa. Por la crisis, el Gobierno quedó con el 54 por ciento de las acciones de la Bolsa Mercantil. Se replanteará su papel como instrumento de fomento agrícola para generar precios, mercados y productos derivados esenciales para modernizar el agro”.

¿Futuro de Fabricato?

“Al igual que con la BMC, las liquidaciones tienen hoy una alta participación en la textilera. Incursiona en el negocio inmobiliario porque los terrenos de Fabricato podrían darle nuevas oportunidades de negocio e ingresos. ¿El resultado? La acción casi dobló su valor en las últimas semanas”.

YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO