La próxima semana presenta el proyecto de ley para destrabar la expropiación de tierras para carreteras; se usarán los recursos de los fondos de pensiones para un moderno plan vial y de infraestructura; se culminarán las dobles calzadas, porque "todas están a medias"; se hará el aeropuerto de Palestina en Caldas, pero "sin más plata del gobierno nacional", y se solucionará el problema de los camioneros colombianos en Venezuela y Ecuador. Propone una fórmula para destrabar dificultades en Eldorado.
"La situación del sistema vial hay que mirarla en dos sentidos. Estamos en la peor época invernal de los últimos 30 años y lo estamos afrontando bien; el 90 por ciento de las vías del Ministerio de Transporte se están atendiendo. Tenemos un 10 por ciento con problemas severos. El otro sentido es el de la situación general de las carreteras".
¿La sensación de que Colombia no tiene carreteras es válida?
Es válida. Es cierto que en el Gobierno del presidente Uribe se pasó de 50 kilómetros de dobles calzadas a casi 1.000 kilómetros. El problema es que son 950 kilómetros adicionales discontinuos. O sea, 20 kilómetros acá, 15 allá, 36 al otro lado. Urgen dobles calzadas continuas.
¿No hay ni una?
No. Se están haciendo tramos. Bogotá-Girardot tiene innumerables problemas; Girardot-Ibagué funciona bien; Ibagué-Cajamarca, no hay nada; el túnel de La Línea es unidireccional... Loboguerrero-Buenaventura tiene problemas geológicos, ambientales, de predios. Es solo el ejemplo de la vía Bogotá-Buenaventura.
¿Y hacia la Costa Atlántica?
Bogotá-Tunja también tiene problemas de predios. Para que lo sepan los gobernadores y los alcaldes: no vamos a volver a iniciar carreteras con el presupuesto nacional, sino en aquellas regiones donde los gobernadores y los alcaldes nos ayuden para que las comunidades se comprometan a aportar los predios a valores comerciales.
¿El Estado no tiene instrumentos para expropiar con indemnización?
Tenemos experiencia en la expropiación de bienes inmuebles urbanos, no en rurales. Vamos a presentar una nueva ley de expropiación al Congreso para expropiar pagando lo que diga el avalúo, lo presentamos la próxima semana. Por falta de buenas carreteras, Colombia está próxima a un infarto vial.
¿Y cuál es la solución?
Buscar otras alternativas de financiación. El uso de los fondos de pensiones, por ejemplo, pero garantizando proyectos rentables y bien estructurados. También se requiere inversión nacional y extranjera para los grandes proyectos.
¿Cómo y cuando se utilizarán los recursos de los fondos?
Acabo de reunirme en Washington con la banca multilateral y estamos trabajando sobre eso. Tenemos el problema del Instituto Nacional de Concesiones (Inco), al que le vamos a dar una reestructuración total para convertirlo en la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI). El Inco perdió la credibilidad a nivel nacional e internacional.
¿Y se acaba el Inco?
Se transforma. ANI se dedicará a estructurar proyectos y a buscar inversionistas extranjeros. Vamos a concesionar con fuerte inversión privada las troncales y transversales. ISA, por ejemplo, está haciendo la estructuración de Autopistas de la Montaña; a mí me gusta mucho el esquema de ISA.
Tanto el Banco Mundial como el BID y la CAF apoyan la utilización de los recursos de los fondos de pensiones?
Sí, y ya se le propuso al presidente de Asofondos, Santiago Montenegro.
¿Y qué falta para arrancar?
Proyectos bien estructurados y un músculo financiero fuerte. Sobre lo primero, le voy a dar un ejemplo: la segunda calzada Bogotá-Villavicencio desde el punto de vista de ingeniería se pudiera hacer en tres años y medio, pero desde el punto de vista de la estructuración, como quedó, hay que hacerla en siete años. Estamos revisando de qué manera se puede acelerar ese proceso, porque ese tipo de vías son las que Colombia necesita urgentemente.
¿Cómo operaría el nuevo esquema de concesiones?
Estilo la Ruta del Sol, estructurada por la IFC del Banco Mundial. Se demoraron tres años estructurándola, se adjudicó y la vamos a construir. Queremos que sea un modelo de obra: continua, y que en esos 1.000 kilómetros de Bogotá al Caribe no tengamos tropiezos con la adquisición de tierras.
Para concluir el tema de carreteras: ¿cuál es la prioridad?
Terminar las dobles calzadas inconclusas. Hacer continua la doble calzada entre el centro del país y Buenaventura, hacia el Caribe y la Orinoquia. Y una que para el Gobierno es muy importante, la carretera de Quibdó a Medellín, necesaria para que el país sea más inclusivo.
¿Se trata de la privatización de las carreteras?
Eso es lo que hay que hacer.
¿Cuál es la situación de los puertos?
Hay que tener puertos especializados en minería e hidrocarburos.
¿Cuál es el problema de los canales de acceso a los puertos?
Cada vez llegan buques con mayor capacidad y calado y hay que profundizar los canales de acceso a los puertos. Profundizar el canal de acceso a Buenaventura. En Cartagena tenemos necesidad de un nuevo canal, debido al incremento en el tráfico marítimo; en Barranquilla es urgente profundizar el canal de acceso del río Magdalena, por lo menos a 40 pies. Les he pedido a los operadores portuarios que asuman esas obras y se les pagarán con contraprestaciones. Para el canal de Buenaventura se necesitan 40 millones de dólares y no los tenemos.
Situación de aeropuertos: ¿se hará o no el de Palestina, en Caldas?
Se ha hecho una inversión de 130.000 millones de pesos. Sobre ese aeropuerto se habló de que valía muchísimo menos y estamos ante una obra que demanda y demanda recursos. Ese es el tipo de obras que se emprendieron sin estudios.
¿Y el problema de asentamientos que se ha presentado frustra la obra?
He pedido que la Gobernación de Caldas y la Alcaldía de Manizales contraten expertos que analicen la situación. Quiero que pongamos ese tema en blanco y negro, pero la región no puede esperar que el Gobierno siga arbitrando recursos eternamente para ese aeropuerto.
¿La dificultad de los asentamientos es superable?
Todo es superable, no sabemos es cuánto vale. Por eso necesitamos estudios que han debido hacerse antes de comenzar.
¿Y Eldorado?
Tenemos una dificultad: las bodegas de carga se terminaron y el concesionario Opaín las arrendó a una tercera empresa a un precio determinado, del cual la Aerocivil debe recibir el 46 por ciento.La empresa que tomó las bodegas las está alquilando a un precio más alto del que nos pagan a Opaín y la Aerocivil. Nuestra solicitud es que a Aerocivil se le pague el 46 por ciento, descontando si es necesario un costo de administración.
¿Y qué dice Opaín?
Me hablaron de que habían crecido el área de las bodegas y que eso había tenido unos sobrecostos. Yo les dije que si invirtieron más dinero le reclamaran a Aerocivil y ella decidirá si acepta o no esa reclamación, pero al Estado le tienen que mantener el 46 por ciento.
¿Ese problema entorpeció todo?
Eso nos generó desconfianza. En el tema de la demolición del terminal, si nos van a tratar de la misma manera, ¡imagínese a dónde vamos a parar! Opaín entendió y reversará la operación de las bodegas.
¿Y cuando reversen qué ocurrirá?
Se recupera la confianza y vamos a negociar la demolición del viejo terminal. Están pidiendo unas cifras muy altas, que nos tienen muy alejados. El edificio a donde llegamos todos a tomar un avión será terminal nacional. En la internacional no hay problema. Dentro del contrato original quedó que el edificio se iba a remodelar, luego se acordó demolerlo. Como están cobrando un dineral, les dije que nosotros podemos hacerlo y lo entregamos igual a como ellos lo tienen en los diseños. Lo operan por 20 años en las condiciones del contrato y listo.
¿Y qué le dijeron?
No ha pasado nada.
¿Cómo van nuestras relaciones aéreas con Venezuela?
Habrá una política de cielos abiertos, para que puedan volar con facilidad las aerolíneas de un lado y otro.
A los camioneros colombianos no los dejan entrar. ¿Qué se va a hacer?
Ese tema lo hablamos con Chávez. Él se sorprendió y dio orden para que normalizaran la situación. Lo mismo ocurre con Ecuador. Conversé con la Ministra de Transportes para hacer lo mismo.
¿Venezuela cumplirá lo que ofreció el presidente Chávez?
Estoy seguro. Como dijo el presidente Santos, el presidente Chávez es nuestro nuevo mejor amigo.
Ultimátum por doble calzada
Socios de Nule deben acelerar obras en la vía Bogotá-Girardot
¿Qué va a pasar con la doble calzada Bogotá-Girardot?
No podemos seguir diciendo que esa concesión es de los Nule. Eran cuatro socios y el 25 por ciento era de ellos. Los otros tres socios son firmas muy respetables y les dijimos que tienen que arreglar el problema entre los tres y responder por la obra. Se acabó el cuento de que, como un grupo tuvo problemas, el resto no pueden seguir.
¿Cuáles son las firmas?
Vergel y Castellanos, Álvarez y Collins y Alejandro Char, el alcalde de Barranquilla. Estoy esperando que cumplan. Si no reanudan con la celeridad requerida, entramos en un conflicto que no va a favorecer a nadie.
¿Qué piensa el presidente Santos?
Me dijo textualmente: "Ojo, con esa carretera, para que no se nos vaya a volver un problema igual al de la calle 26". Estamos vigilantes. Prendimos las alarmas a tiempo y estamos así, con las alarmas totalmente prendidas...
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YAMID AMAT
ESPECIAL PARA EL TIEMPO