El nuevo contralor general de la república, Carlos Felipe Córdoba,
comienza su periodo pisando duro y anuncia un riguroso seguimiento a
los recursos públicos. Para ello, revela que presentará, al día
siguiente de su posesión, una reforma de la Contraloría para cambiar el
modelo del control fiscal.
En esta entrevista detalla en qué consiste el nuevo modelo. Para el cuidado y la protección de los recursos públicos, Córdoba prefiere que los llamados cupos indicativos
(para inversión en las regiones), conocidos popularmente como la
'mermelada', sean manejados directamente por el Gobierno y no por los
congresistas.
Córdoba, ex auditor general, tiene un máster de la
Universidad Rey Juan Carlos de España en Acción pública,
fortalecimiento institucional y participación ciudadana en el Estado de
derecho. Por eso, pide a la ciudadanía que colabore con la Contraloría.
¿Por qué hay tanta corrupción en Colombia?
Yo
creo que es un problema de principios y valores, de educación. Nos hizo
mucho daño la cultura mafiosa del dinero fácil. Tenemos que tratar de
cambiar eso en nuestra juventud. Por eso es tan importante la
participación de la ciudadanía, la creación de veedurías ciudadanas para
que ellos mismos tengan la claridad de que tienen derechos, pero
también deberes como ciudadanos.
¿Dónde está la corrupción? ¿En el sector oficial o en el privado?
En
los dos. Lo importante es cambiar esas formas de actuación en cada uno
de esos sectores. Todo lo que se haga en la lucha contra la corrupción
es importantísimo, pero hay que comenzar desde el hogar. Eso nos ayuda
realmente a cambiar el imaginario de la corrupción. Corrupción hay desde
la mentira que uno dice.
Necesitamos que la
tecnología nos ayude a cuidar el recurso público, pero poniendo los ojos
de los 55 millones de colombianos. Que los colombianos que viven al
lado del kilómetro 13 en la vía de Titiribí, Antioquia, nos digan si
llegaron las tres o cuatro volquetadas de arena o de cemento y nos suban
el video, nos manden las fotos, y así rápidamente, aunque sea
dispendioso, podamos saber qué está pasando. Con más ojos podemos hacer
también que las otras personas empiecen a entender que los buenos somos
más.
¿Cuál es su gran reto?
Vigilar los recursos
públicos de manera eficiente y eficaz, con un control rápido y efectivo
para que esos recursos no se pierdan y lleguen a donde deben llegar.
Una
de las grandes peleas que el contralor Maya dio y perdió es la
supresión de las contralorías departamentales, que él juzgaba como nidos
de influencia de la corrupción, de los diputados y de los gobernadores,
de los alcaldes. ¿Usted es partidario de eso?
Soy partidario
de cambiar el modelo del control fiscal, porque no nos sirven
contralorías como la del Amazonas o la del Vichada, con cinco
funcionarios y en las que no hay ni un abogado ni un ingeniero civil
para hacer la tarea. Ahí es donde necesitamos un control fiscal
robustecido, que realmente funcione. Pero si no nos va a funcionar, sí
es mejor acabarlas.
Dentro del actual sistema de control fiscal, ¿es partidario de eliminar las contralorías departamentales?
Claro, las que no funcionen.
Pero es que la ley no puede decir: 'Elimínense las contralorías que no funcionen'...
Debemos
cambiar el modelo de control fiscal para que esto no se siga
presentando. Necesitamos un modelo en el cual tengamos una institución
que vigile, investigue y recaude el esquema probatorio, que sea técnica.
Y que haya un tribunal administrativo, con jueces jurisdiccionales, que
rápidamente determinen si esas pruebas son válidas para salvaguardar el
recurso público y recuperarlo.
Eso nos ayuda en dos cosas. La
primera, en quitarle el tinte de que el que investiga también juzga. Y
la segunda, que no tengamos colores políticos para atender una intención
de vigilancia y control.
¿Cuál es el control fiscal que usted quiere aplicar?
Un
control fiscal preventivo, concomitante y posterior. Quisiera aplicar
un control con tecnología del siglo XXI y de la mano de la ciudadanía.
La tecnología nos ayuda a saber qué está pasando día a día en las
comunidades y las regiones, si efectivamente están llegando los
recursos.
¿No tiene la Contraloría los instrumentos que necesita para actuar?
Le
hacen falta muchísimos instrumentos. Por eso, el contralor Edgardo Maya
tiene un proyecto con el BID para el fortalecimiento tecnológico y la
modernización de la entidad. Desde ese punto vista, vamos enfocados
hacia el mismo lado. Es supremamente importante poder establecer un
nuevo modelo de control fiscal para el siglo XXI, porque el que hoy
tenemos nos deja grandes falencias para la verificación y el control en
línea y en tiempo real de esos recursos.
¿Un nuevo sistema de control fiscal que logre qué?
Vigilancia
y control en todos los momentos, desde el esquema preventivo hasta su
posterioridad. Nos daría la capacidad, por así decirlo, de ver el
recurso público en todo tiempo y en todo momento.
¿Está pensando en una gran reforma de la Contraloría?
Sí. Al día siguiente de mi posesión presentaré un proyecto de reforma constitucional para modificar el control fiscal.
¿En qué consiste?
En
darle a la Contraloría una función preventiva, concomitante y
posterior. Hay que adoptar mecanismos para vigilar todo proceso de
contratación, previamente a la adjudicación.
¿A qué se refiere con la función concomitante que va a proponer?
A
que en todo momento tengamos vigilancia y control sobre el recurso
público, que no quede ningún espacio que no podamos vigilar y controlar,
para que no haya duda. Que la gente sepa que la Contraloría podrá
entrar en cualquier momento a verificar que los recursos públicos sean
bien utilizados.
¿Y la posterior?
La que hoy se tiene.
¿Cómo es la etapa preventiva que presentará la reforma?
El sistema que propondré busca hacer un acompañamiento a los procesos y los contratos en las regiones y a nivel nacional.
¿Diría usted que escándalos como el de Reficar se produjeron porque no hubo un control preventivo?
Exacto.
Lo que buscamos es tener un control preventivo que redireccione el tema
precisamente en el momento clave, para que hoy no tengamos problemas
tan graves como ese.
¿Qué va a hacer con Reficar?
Tengo
que llegar a conocerlo. No conozco los pormenores, pero seguiremos
adelante con lo que diga el proceso y lo que digan las pruebas. Vamos
para adelante con el tema, ni más faltaba.
Usted tiene tan claro este proyecto de reforma que da la impresión de que lo está pensando desde hace mucho...
Desde hace rato. Soy un gomoso del control fiscal.
¿Qué novedades trae el proyecto?
Tiempos
mucho más cortos en los procesos de responsabilidad fiscal. Un esquema
tecnológico para el proceso verbal de control fiscal. Un expediente para
que los procesados puedan recibir por vía electrónica todas las
actuaciones y eso nos ayude en el avance procesal. Eso nos puede ayudar a
ahorrar mucho tiempo, para dar resultados claros y contundentes en la
recuperación del recurso público.
El pliego tipo es una buena manera de control, pero los departamentos no lo aplican. ¿Lo va a imponer?
Lo impone la ley, no yo.
¿Y cómo hará para que los gobernadores le hagan caso?
Para
eso están la Contraloría, la Procuraduría y la Fiscalía. Quien no la
cumpla, tendrá que someterse a las sanciones disciplinarias, penales y
fiscales.
¿Va a exigirles el cumplimiento de la ley?
Tienen
que hacerlo. Tendremos el ojo sobre ellos permanentemente. Por eso es
tan importante un modelo que tenga la fortaleza en la vigilancia. No es
problema del doctor Maya, quien ha hecho una gran contraloría, ni de la
doctora Morelli ni del doctor Turbay en sus contralorías. Es el sistema
de control fiscal. Por eso se debe cambiar, para que sea eficiente.
¿Le gusta el sistema de cupos indicativos para ayudar a las regiones?
Necesitamos quitar filtros para que lleguen los recursos.
¿Quitar filtros o poner filtros?
Quitar filtros que generen cualquier esquema de desviación del recurso.
¿Son buenos los cupos indicativos activos para los distintos parlamentarios?
Los
cupos indicativos para ayudar a las regiones son buenos, pero hay casos
en que se han desviado. Lo importante es que el recurso llegue a donde
debe llegar; por eso hablo de los filtros, para que no haya
intermediación del recurso. Es mejor que el Gobierno Nacional sea el que
ejecute todos los recursos.
¿Y eliminar los cupos indicativos que asigna el Congreso?
Creería que sería mucho mejor. Así evitamos algunas tentaciones.
También está el manejo de regalías que hacen departamentos y municipios...
Lo
que nos proponemos es, con mayor tecnología y con todo el esquema de
análisis, poder vigilar dónde está el recurso, si está llegando o no;
pero, además de eso, ayudar en conjunto con la Procuraduría y con
participación ciudadana a hacer un especial seguimiento para que esos
recursos se puedan ejecutar con rapidez, con pulcritud y con eficiencia.
¿Qué va a hacer con los gastos reservados del Estado, que también se descubrieron en la contraloría del doctor Maya?
No
se parará ningún proceso. Se buscará terminarlos lo antes posible para
poder salvaguardar y recuperar el recurso público de todos los
colombianos.
El informe del contralor Maya dice que de los 30
billones para repartir en las regalías hay 12 billones que están sin
ejecución. ¿Usted qué va a hacer?
Es importante empezar a
hacer ejercicios para fomentar la ejecución de dichos recursos públicos,
para que rápidamente se destraben los procesos y puedan llegar a quien
más los necesita.
¿Qué va a pasar con los recursos de la paz?
Lo
más importante allí es salvaguardar dichos recursos. Total compromiso
por parte de este contralor para la vigilancia y el control de dichos
recursos.
Usted sabe que hubo incluso, en el gobierno
anterior, una advertencia de los embajadores que han aportado para el
posconflicto sobre la utilización de esas ayudas. ¿Qué va a hacer ahí?
Tendremos
que ampliar la lupa y verificar qué está sucediendo con dichos
recursos. Necesitamos fortalecer la vigilancia de esos fondos.
"Tendremos que ampliar la lupa y verificar qué está sucediendo con dichos recursos. Necesitamos fortalecer la vigilancia de esos fondos"
Tienen todo el compromiso
de que esta contraloría vigilará desde el primero hasta el último peso
que estén allí, del Estado colombiano o que hayan dado los organismos
internacionales.
Usted reiteradamente ha dicho que es un provinciano...
Pereirano, montañero, provinciano... Y 'echao' pa'lante.
YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO