El Partido Conservador cambiará la política de oposición al gobierno del presidente Santos asumida por uno de sus sectores, por una de apoyo total, tanto a su gestión como al proceso de paz.
El anuncio lo hace uno de los más reconocidos líderes conservadores, el senador Efraín Cepeda, al señalar que esa “es la decisión parlamentaria” que será “refrendada por el Directorio”.
Cepeda pide la renuncia del actual presidente del directorio, Omar Yepes, y señala al expresidente Álvaro Uribe como responsable de la división conservadora. Según Cepeda, el conservatismo seguirá en la mesa de unidad nacional.
El senador del Atlántico revela que se retirará del Directorio Conservador para permitirle al senador Roberto Gerlein, quien alcanzó la más alta votación de ese partido, que asuma la presidencia de la nueva directiva conservadora (Gerlein, 127.000 votos; Cepeda, 98.500).
Cepeda pide más representación para el conservatismo y para el sector caribe en el Gobierno. Cepeda es senador desde 1991 y fue reelegido hasta el 2018. Es considerado uno de los más influyentes e importantes dirigentes políticos del país.
¿Quién tiene hoy la vocería oficial del Partido Conservador?
Hay dos tipos de vocerías. La de los parlamentarios, que siempre han decidido sobre apoyo político y conformación de bancadas, y la del Directorio Nacional, que debe reflejar la posición de los congresistas del partido puesto que son sus miembros en todo el territorio nacional los principales electores de la doctrina conservadora representada en el Congreso.
En la junta de parlamentarios, el sector santista del Partido Conservador tiene mayoría, pero en el Directorio la oposición al Gobierno es la mayoritaria. ¿Cómo dirimen ese conflicto?
En las reuniones de las bancadas de Cámara y Senado, la gran mayoría de quienes apoyaron la candidatura uribista de Óscar Iván Zuluaga expresaron estar dispuestos a ingresar a la coalición de gobierno. Habría una coalición de 47 parlamentarios, 19 senadores y 28 representantes apoyando al Gobierno. Sería un contrasentido que el Directorio marchara en contravía de ese pensamiento. Además, el Partido Conservador ha sido tradicionalmente amigo de la paz, buscando en varios de los gobiernos conservadores poner fin al conflicto armado. Sería un gravísimo error histórico no solo dar la espalda al clamor nacional evidenciado en las recientes elecciones, sino encontrarnos en la otra orilla en el momento de la firma de la paz.
¿Qué es lo que ha dividido al Partido Conservador?
Hay un sector de marcada tendencia uribista que la provoca.
¿Hasta dónde influye el expresidente Uribe en el Partido Conservador?
Cada día, su influencia es menor hasta tal punto que los parlamentarios ratificaron en su mayoría que están del lado de la paz y de la coalición de gobierno. Es claro que durante sus ocho años de gobierno, el expresidente demostró estar más cerca de las doctrinas conservadoras que de las liberales y por eso atrae a un sector del conservatismo. Pero reitero, la junta de parlamentarios cada día se acerca más a la iniciativa de trabajar unidos para la consecución de la paz nacional y la justicia social representada en los esfuerzos del presidente Santos y su programa de gobierno 2014-2018.
¿En cierta forma es el expresidente Uribe quien divide al Partido Conservador?
Sí. Esa influencia ha provocado eso. En las elecciones parlamentarias, algunos conservadores militantes se fueron a las toldas del Centro Democrático, votaron por ellos y le causaron un daño al conservatismo. Sin duda, el expresidente Uribe ha jugado un papel importante en la división entre santistas y uribistas.
¿Qué futuro tiene el Partido Conservador en estos cuatro años de gobierno?
No hay heridas entre los parlamentarios y por eso creo que se puede facilitar el ingreso de casi el ciento por ciento del conservatismo a la coalición de gobierno.
¿Pero usted cree que quienes, en el Partido Conservador, como lo ha reconocido, siguen las orientaciones del expresidente Uribe van a aceptar actuar contra él y apoyar al gobierno del presidente Santos?
Esas orientaciones las veo más en el directorio que en la junta parlamentaria. Vemos que ya el presidente del partido ha expresado que está reflexionando sobre la posición de apoyar o no al Gobierno, diferente a la posición de Marta Lucía Ramírez, que quiere que se haga oposición.
El Directorio no debería ir en contravía de las decisiones de los congresistas que representamos el sentir del país, y ese es el llamado que le hacemos al Directorio y al presidente del partido: que no cometamos el error de hacer oposición al único proceso de paz que en la historia del país ha avanzado tanto y ha profundizado en resolver las raíces del conflicto para evitar su repetición.
Cada día, en las bases conservadoras hay más simpatizantes del proceso de paz. En ese sentido, la doctrina conservadora tiene una gran responsabilidad para reconciliar las visiones de país y propender por el desarrollo y la justicia social.
¿A qué adjudica la inmensa mayoría que el presidente Santos obtuvo en la Costa y que prácticamente aseguró su reelección?
Lo primero es que la región Caribe ha sido siempre territorio de paz y amiga de la paz. Es una realidad que el presidente Santos ha estado cercano al pueblo en su lucha contra la pobreza y las desigualdades, y con sus programas de vivienda y asistencia social, entre otros. La costa Caribe también cuenta con un gran número de víctimas del conflicto armado; esa población en particular ha entendido el mensaje de respaldo y defensa histórica que Santos ha hecho en relación a sus derechos. Así mismo se reconocieron los grandes efectos en desarrollo y empleo que originaron las altas inversiones del Gobierno en la Costa. Además, los parlamentarios salimos también a recorrer los municipios, a defender y promover las propuestas del Presidente.
Como se sabe, la diferencia en el Caribe colombiano en favor del presidente Santos superó el millón de votos y por eso el Caribe colombiano reclama esa victoria. Fuimos artífices, fuimos fundamentales en la victoria. El Caribe como región clave en el desarrollo nacional, ligado a la inversión extranjera, apertura y estabilidad económica, reclama más participación en la inversión nacional, más obras y más representación en el Gobierno.
¿Más carteras en el gabinete, dice usted?
Deseamos una mayor representación y una mayor inversión.
En el mundo entero, cuando hay una elección presidencial, el jefe del partido que pierde las elecciones renuncia. Omar Yepes, actual presidente del Directorio Conservador, quien apoyó la candidatura conservadora de Marta Lucía Ramírez y se abstuvo, en la segunda vuelta, de apoyar la candidatura del presidente Santos debería renunciar?
Triunfó el presidente y triunfó la paz. Si él insiste en hacer oposición e ir en contra del proceso de paz, debería dar un paso al costado. Al fin y al cabo fue derrotado. Debería entender el momento político.
¿Ustedes pedirán oficial y formalmente en el Directorio su dimisión?
Tiene que haber una convención pronto para elegir nuevos miembros puesto que la representación congresional se toma por las votaciones de las pasadas elecciones, para permitir el ingreso de los cuatro primeros en la votación para el Senado.
¿Quiénes fueron los cuatro primeros senadores conservadores?
Las cuatro votaciones más altas, en su orden, las obtuvimos Roberto Gerlein, mi persona, Nora García y Laureano Acuña. Como no podemos estar dos o más representantes del mismo departamento en un periodo de dos años, entrarían Javier Mauricio Delgado y Nidia Marcela Osorio.
¿Y los cuatro primeros representantes?
Independientemente de las cuatro primeras votaciones, el Directorio consulta tres categorías diferentes de departamento. Por eso entrarían David Barguil, Aída Merlano, Viela Benavides y Orlando Guerra.
¿Estos 8 parlamentarios deben ingresar al Directorio?
Sí, porque estatutariamente no pueden estar en el Directorio dos congresistas del mismo departamento. Pero, según los estatutos, la representación congresional se refresca cada dos años.
¿Usted aspira a la presidencia del Directorio?
No. Es más, no estaré en el Directorio en los dos primeros años. En ese periodo entra el senador Roberto Gerlein, quien fue la primera votación. Yo fui la segunda votación y entraré en los dos últimos años.
¿Y si se produce la renuncia de Yepes, debe asumir la presidencia del Directorio el senador Gerlein?
Así es. Y propondremos oficialmente su nombre para esa distinción.
¿Y obviamente cambiará la posición política del Directorio frente al Gobierno?
Por supuesto. Es que va a cambiar la correlación de fuerzas en el Directorio.
Y usted cree que eso es lo que va a pasar…
Eso es lo que va a pasar y es la voluntad de la mayoría de los parlamentarios.
¿Cómo se va a reflejar esa actitud en el Directorio?
Se refleja inmediatamente porque si todos los parlamentarios ingresan a la coalición, es lógico que quienes además son miembros del Directorio cambien su posición y con ello la correlación de fuerzas. Su voto dentro del Directorio tiene que ser en favor de la participación activa del Partido Conservador en la consecución de la paz a través de la coalición de gobierno.
¿En su opinión cuál es el futuro de Marta Lucía Ramírez?
Yo estoy seguro de que el partido va a convocar, como lo hicimos en época de Noemí Sanín y Andrés Felipe Arias, una consulta popular sobre la futura candidatura presidencial. Ella podrá participar si es que toma la decisión de continuar en el Partido Conservador y no regresa a las toldas del uribismo.
¿En su opinión, a pesar de su derrota al apoyar a Óscar Iván Zuluaga, ella debe continuar en el Directorio?
Mientras no se elija el nuevo directorio, ella conserva su calidad de directorista.
¿Piensa adelantar gestiones para evitar que se formalice la división conservadora?
He tenido reuniones con muchos de los parlamentarios para unificar el partido. Tenemos que darles prioridad a todos los temas de la paz, al manejo eficiente de la Hacienda pública, al impulso del sector agropecuario y ambiental entre otros.
¿El Ministerio de Hacienda debe continuar en manos del Partido Conservador…?
Nuestra economía atraviesa por uno de sus mejores momentos históricos; para muestra, el espectacular crecimiento de 6,4 por ciento en el último trimestre y su solidez. El ministro Mauricio Cárdenas tiene todos los merecimientos para continuar en la cartera de Hacienda. Y no solo gran capacidad para continuar: es también una de las grandes reservas del partido.
¿Ideológicamente, hasta dónde el Partido Conservador procurará que no haya un gobierno de izquierda?
Tendrá que ser fiel de esa balanza. Recordemos que la izquierda ha manifestado que continuará su oposición desde la actividad legislativa con base en las diferencias programáticas expresadas en su candidatura presidencial. En la mesa de unidad nacional, los conservadores tendremos esa voz para expresar que este sea un gobierno de centro. Estamos seguros de que el Presidente ejercerá un gobierno de centro. Y ahí estará el Partido Conservador para recordarlo todos los días.
YAMID AMAT
Especial para EL TIEMPO
yamidamat.com.co