Corrupción por apuestas en partido de los cuadrangulares investiga Federación Colombiana de Fútbol

Luis Bedoya, en entrevista con Yamid Amat, confirma que se averigua sobre "si una decisión del árbitro no fue, simplemente, un error humano". También habría un caso de soborno en la primera B.

Dos casos vuelven a prender las alarmas en el fútbol colombiano. En el primero, en el campeonato profesional, el presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Luis Bedoya, revela en la siguiente entrevista que ese organismo investiga la posible aparición, de nuevo, de apuestas que habrían originado la decisión equivocada de un árbitro, en un reciente partido de los actuales cuadrangulares semifinales.

El segundo: en el torneo de la primera B se pidió a las autoridades penales investigar a ejecutivos del Valledupar Fútbol Club que habrían intentado sobornar un árbitro, según pudo confirmar quien realiza esta entrevista.  Bedoya asegura que el arbitraje no está amenazado y califica como "absolutamente aislado" el caso que se investiga.

YAMID AMAT Son muchas las quejas por recientes arbitrajes. ¿La federación adelanta algún tipo de investigación?

LUIS BEDOYA Sí. Nos preocupa especialmente el caso de un árbitro en un reciente partido del cuadrangular. Fuimos advertidos, previamente, de eventuales irregularidades sobre su trabajo en ese partido. Y esas irregularidades ocurrieron. Estamos investigando.

¿Qué se investiga?

Si es cierto que se pudo haber presentado un caso de corrupción.

¿En qué sentido?

Averiguamos si una decisión del árbitro no fue, simplemente, un error humano.

¿En cuál partido ocurrió?

Es reserva de la investigación.

¿Pero es que regresó la corrupción en el arbitraje en Colombia?

No. El caso que investigamos es aislado. Hay errores arbitrales, que es distinto. Errores, reconozco, producto de la deficiencias en la formación y capacitación de los árbitros. Por eso, vamos a fortalecer las tareas de capacitación de nuestros árbitros y de control sobre los colegios regionales en donde se forman.

¿No estamos regresando a las épocas aciagas de compra de árbitros?

No. Al contrario, tenemos un arbitraje con deficiencias, pero honesto. Se ha presentado el caso que estamos investigando. Esa investigación es la mejor prueba de que cuando se presenta alguna duda, la investigamos y la denunciamos.

¿El arbitraje que investiga supone que algún equipo sobornó a un árbitro?

No. Aparentemente tiene que ver con apuestas. Eso es lo que investigamos.

¿Quién los previno? ¿Quién advirtió que se presentarían irregularidades?

Funcionarios de un equipo de fútbol.

¿Del equipo que fue afectado?

Sí, señor.

¿Ese equipo perdió el partido?

Sí, señor.

¿Por las decisiones del árbitro?

Sí. El error del árbitro incidió en el resultado.

Las apuestas en el fútbol provocaron, hace precisamente 20 años, el asesinato del árbitro Álvaro Ortega. ¿Volvimos a las mismas?

No, eso no es lo que estamos viviendo. Repito, es un caso aislado, pero, frente al riesgo, combatiremos cualquier incidencia de agentes extraños en el fútbol.

Si el caso que denuncia es aislado, ¿por qué tanta queja general sobre el arbitraje?

Ha habido algunos errores que se están magnificando. En estos torneos cortos hay una presión muy grande sobre el arbitraje.

¿Por qué los árbitros están cometiendo tantos errores?

Eso no es verdad. Se comenten errores, pero no "tantos errores". Es que usted no puede confundir los errores con los escándalos.

¿Cómo así?

Los árbitros cometen errores, es cierto, pero los magnifican y nace el escándalo. Son los técnicos, los directivos y, a veces, los jugadores quienes crean el escándalo.

De todo culpan al juez. Basta ver los medios: en 10 programas distintos pasan 50 veces la jugada polémica, para determinar si hubo el error o no. Y lo discuten horas. Y tienen ayudas visuales. El árbitro, en cambio, tiene que decidir en fracción de segundos. A veces se equivoca. Eso pasa aquí y en todos los campeonatos del mundo.

El error es parte del juego, parte del fútbol, porque la actuación arbitral es la actuación humana, y la actuación humana siempre está sujeta a que exista un error. Lo que buscamos es que haya el menor número posible de errores.

Conclusión: ¿hay que aceptar los errores del árbitro?

Sí, claro que sí. Eso es parte fundamental del fútbol en el mundo entero. Hablo del error humano, no de otro tipo de arbitrajes, como hubo en épocas desgraciadas, por fortuna totalmente superadas.

¿Usted está contento con el trabajo de los árbitros colombianos?

No estoy satisfecho. Hay que mejorar. Vamos a establecer con la Comisión de Arbitraje normas de control sobre los colegios que forman los árbitros y vamos a incrementar la capacitación: cursos, seminarios, instructores. Vamos a contratar un preparador físico, para que vigile el estado de los árbitros, que tienen que ser atletas. Hará, además, un seguimiento estricto a los colegios arbitrales.

¿Le parece excesiva la sanción que le impusieron al técnico Jorge Luis Pinto?

No. Primero, porque el juez no cometió ninguna falta y fue agredido verbalmente. Segundo, porque creo que ese tipo de actuaciones son las que más daño hacen al fútbol. Tenemos un problema muy delicado, que es la violencia, y situaciones de este tipo pueden crear desbordamientos graves.

¿Por qué ha crecido el irrespeto al árbitro?

No sólo al árbitro. En general, a todas las autoridades. Es el reflejo de lo que vive hoy el país: el muchacho irrespeta a sus padres; el alumno, a sus maestros; el ciudadano, al policía; el conductor, a los semáforos. En el fútbol, al árbitro comienzan a "putearlo" desde cuando sale a la cancha, antes de que haga sonar el pito por primera vez. ¡Así no se puede!